Como sé que la mayoría de los lectores que se asoman por aquí son amigos, incluso bastantes primos fuera del pueblo, les muestro entrañables fotos familiares, para completar a las anteriores. Pinchen para verlas mayores.
Como en casa de buenos villalpandinos, "La Purísima", no podía faltar.
El rincón de Sara. Libros que no falten. Mi último leído el reciente de Fernando Aramburu, nada que ver con "Patria".
Sarita, la de Cobera. Con la de pretendientes que tuvo, ni sé cómo quiso al pobre escribiente de casa de Cossio. Les puedo asegurar que fue una historia llena de romanticismo.
Sara-Belén con su Nacho. El rubito de arriba es Rodrigo. Todavía llegó a conocerlo así de guapo su madre. Injusto, horrible, incomprensible. La niña de arriba, a la derecha, es Inés. Ya fue "quinta" del "veintidós".
Licenciada en medicina "Cum Laude" por la Universidad de Salamanca. Un profesor, pariente de los del Comercio Grande, dijo aquí un día, no a nadie de la familia, que era la alumna más brillante de la universidad.
Ustedes perdonen. Muestro cierto pudor al enseñarles lo anterior. Estoy llorando a moco tendido.
Fores, un perrito cariñoso, santo. Como ven prefiere las caricias (se tumba así para que le rasque) a la comida. Además huye de la disputa con los gatos. El blanco es lo más malo y ladrón del mundo. Se me mete en casa entre las piernas. Si no le echas se sube a la encimera, destapa la cazuela y mete la zarpa.
Insisto en el pudor por colgar las fotos anteriores. Estoy dudando por abrir a los vientos nuestra intimidad. Las dejo por mis primos y los blogueros, la mayoría, amigos. Mis sentimientos bondadosos no se contradicen con las críticas de otras entradas. Intento no ofender en lo personal. Apaciguo mi conciencia pensando que ni miento, ni enredo; que actúo por principios de ética, de justicia. Si alguien no está de acuerdo, que me lo diga. Admito errores.
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