domingo, 30 de diciembre de 2018

LAS NAVIDADES DE MI INFANCIA Y PRIMERA JUVENTUD.


  Cuando en el penúltimo artículo les describía aquel entrañable poblachón del barro y los carámbanos, muchas casicas y pocas casonas, pajares, cuadras y cabañales, rodeado por la cava, eras, bodegas y lagunas, aquel poblachón de lagares y tenadas, de trilliiques y agosteros, de hambres y de senaras, lo hacía para trasladar a los más jóvenes a un ambiente rural casi idéntico al del Belén del Nacimiento.


    Aquí, como en todos estos pueblicos, seguían repitiéndose las mismas escenas: en el portal de la Iglesia de Santa María, que resistió muchos años al derrumbe de la bóveda central, refugio de gitanos trashumantes de feria en feria, conocí parir a alguna gitana (Rafael Farina, nació en pajar de un pueblo de Salamanca), y a las mulas y burros darle calor; por cualquier calle se veían aguadoras, cántaro al cadril y sacadero de la mano; lavanderas junto a los caños y en la "Comendadora"; curros de Amosín y de la "Zamorana" en el "Excomulgado" y  la Redonda; pequeños rebaños por doquier, incluso pastores que dormían al raso, junto a la telera en el Raso... ; herreros de bigornia y fuelle; zapateros tachueleros; herradores, carrateros, guarnicioneros, cesteros, estereros,... Incluso, cuando la raquítica luz de las escasas bombillas, nos permitían gozar del firmamento (no sé para qué ahora tanta farola, tanta contaminación lumínica en calles desiertas), podríamos buscar entre las estrellas "que se tiraban a uno" cuando aquellas heladas, a la que guió a los Magos.

     Vivíamos las Navidades de una forma entrañable. Había algo que se respiraba en el ambiente: el precioso Portal de Belén que montábamos al fondo de la nave de la sacristía en la Iglesia de San Nicolás, algunos muchachos nos encargábamos del musgo, y los pequeños escaparates de las confiterías del Sr. Felipe, "el Rufo"; la de Cruz, "Sinforiano"; y la de la "señá" Severa. Frente a ellas pasábamos los niños muchos ratos, relamiéndonos, ante las figuritas de mazapán, los turrones artesanos y las cajitas redondas dentro de la que se enroscaba la culebra de dulce, peladillas, piñones  y confites. También del resto de tiendas salía luz que alumbraba por la noche, que le daba alegría a la calle.

    Decía el refrán: "Hasta Navidad ni hambre ni frío". Las de la gran hambruna fueron las del cuarenta y cinco, cuarenta y seis. Mis recuerdos son de austeridades, pero no de ver a gente muerta de hambre. Ya desde finales de los cuarenta, cincuenta, entre los jornales de plantar pinos, los de entresacar, arrancar, pelar remolacha (cultivo que comenzó entonces), y el alto precio que tenía el trigo, los pueblos vivieron una incipiente prosperidad: que al menos no faltara el cacho pan que llevarse a la boca.

   El gran aliciente de las Navidades, como el de bodas y otras fiestas, era la comida, sobre todo los dulces, de los que estábamos muy a deseos, pues apenas si probábamos el azúcar (escasa y cara) el resto del año.  

    Ya por los sesenta, hasta los obreros mataban marrano. En nuestra casa, como en otras tantas de clase media, criábamos dos. Matábamos el primero, como más tarde, vísperas de Navidad, forma de tener repleta la fresquera, los varales y las ollas. Aquellos si que eran unos mondongos como Dios manda, en los que se aprovechaba hasta las carrapatas.  Nada se tiraba. Hasta la porquería de las tripas la comían las gallinas.

    Y así, con marrano recién muerto, podíamos, en los días señalados, darnos el gusto de comer lomo en zuza, chichas, chorizo de callos al encallete y, sobre todo, las delicias de la caldera donde se derretían grasas, de donde salían los coscarones, y algo del tocino. si era gordo, pues el resto debería durar todo el año para un poco en cada cocido diario y para los "torresnos" de las meriendas en el campo. En esa manteca hirviendo se echaban peras de compota, cebollas, ajos, castañas,.. Duraban días, después, vueltos a calentar y con unos granitos de azúcar eran un postre delicioso. Un  poco de turrón y una botella de sidra eran todo el extraordinario.

    A las familias más pobres, las que no mataban marrano, algo de alimento les repartía "Auxilio Social", también las otras familias, en el "enviado", algo le llevábamos de las matanzas.

     Puede que me engañe mi percepción infantil, incluso juvenil, pero quiero recordar que por Navidad un ambiente de fraternidad reinaba en el pueblo. Ahora considero que "muchas procesiones irían por dentro", que la guerra civil con sus odios y crímenes estaba reciente, que vivían hijos, hermanos, padres de víctimas..., y si no los ejecutores, al menos delatores, eran y  vivían en el pueblo.    

  En lo que yo recuerdo, pasados los primeros dos o tres años a continuación de la contienda, en que los vencedores ejercieron cierta presión sobre los vencidos más rebeldes (por ej.: obligar a alguno de esos a ir a Misa los domingos, contado por uno de los obligados, y obligar a las mozas a no ir en piernas, o sea: llevar medias), creo que lo que se impuso fue una especie de resaca, de hartura, un deseo de pasar página.

    Sé que los familiares de las víctimas nunca olvidaron, que cuando le hicimos el homenaje, en dos mil seis, se acabaron de cerrar heridas, pero en aquellos años, finales de los cuarenta, cincuenta, se fue imponiendo la convivencia. Y los días de fiesta se llenaba el cine, y el ambigú y el salón de los Mantecas. y Bartolo, Torti, Enrique "·Riesco", Citos y en el bar del cine, se vendían garrafones y garrafones en chatos de mal vino (de cosecha local: lagares sucios, cubas sebosas, conservador Enologil y metabisulfito))  a dos reales.

      Se llenaba el juego de pelota, y las iglesias, y la plaza. Convivíamos. Recuerdo que mi familia se llevaba bien con todas las del pueblo. La única con quien no nos hablábamos era con los vecinos de enfrente. 

     Parece ser que Adolfo, el mayor de los Curreros, había sido novio de tía Petra, la mayor de los Modroño. Con esa falta de relación acabé yo de joven. Cuando Tomás Toranzo y Matilde Cepeda empezaron a tener niños ya por entonces nuestra relación era estupenda. A Jesús, por ej.  le fabricaba yo los peligrosos, en sus manos, pinchaperros, Luego Marta, la penúltima, nació cuatro días antes que nuestra Gracia, la mayor. Esa tan grande amistad no se nos olvida. 

   Una muestra de que las heridas de la guerra se fueron curando lo fue el hecho de que, en la sección social en la Hermandad de Labradores y Ganaderos, fueran elegidos vocales obreros muy significados de izquierdas. Por ej.: Eumenio "el Tocinero", quien por sus ideas de izquierda moderada, PRRS, había pasado cinco años en la cárcel; Melecio Mansilla de la UGT, idem de lo mismo; Serapio Veledo, quien nunca ocultó su socialismo, hijo de un fusilado. Éste tuvo cargos a nivel provincial. Acabó su vida laboral siendo, durante bastantes años, empleado municipal, antes, y unos pocos, en los primeros años, de la democracia.

    Ahora, en un pueblo envejecido y semidesierto, echo de menos aquella, no sé si soñada, fraternidad (yo, al menos, de joven y hasta cierta edad, hasta que fui concejal) me llevaba bien con todo el mundo. Puede que por predominar la población juvenil hubiera menos odios. Y es mi deseo LA PAZ, dentro de la justicia.  Esa es la esencia del Cristianismo.

    Una prueba de que el pueblo español, a la muerte de Franco, no deseaba más conflictos, más guerras, fue la transición a la democracia.

    Ahora algunos están intentando resucitar viejas confrontaciones, que ya no tienen lugar. Para ello hasta han promulgado una ley, con la que tergiversan los hechos históricos. Bien lo de recordar a las víctimas, lo de exhumar restos, pero a todas, y dejémonos ya del falaz maniqueísmo de buenos y malos. Esa especie de revanchismo de las desteñidas izquierdas actuales está provocando la reacción al otro extremo. ¿No vamos a escarmentar de extremismos de diestra y siniestra? 

     En la guerra civil, junto a mucha crueldad, hubo, aunque menos, alguna humanidad. En ambos bandos también existieron bienhechores que salvaron vidas. Aquí en Villalpando conozco un caso que estuvo oculto hasta después de muerto Franco. A mí me lo contó de primera mano el protagonista, un miliciano, encarcelado al acabar la guerra, a quien salvó la vida, con su gestión, el padre de un muchacho "caído" en el bando nacional, al que se había pasado por sus ideas Cristianas, desde el frente republicano. Le había pillado la mili en Madrid. Ese hecho real fue el armazón del cuento titulado "El Jornalero", publicado en "La otra historia de la villa"!.


     Ahora, por su relación con la Navidad, traslado un fragmento del mismo. Intento reflejar lo que fue la reconciliación nacional.  Lo cuenta, en primera persona, el jornalero, que fue miliciano con el grado de teniente, en el ejercito  de izquierdas.

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Salí a la plaza el 21 de junio. Aquel año volvió a celebrarse la feria, sin fiestas. La vida seguía. La recolección, encima. Era necesario ajustar agosteros, reponer algún trillo, tornaderas, redes o bieldos. Tuve varias ofertas. Aún recordaban mi fama de buen trabajador. Entre los cincuenta muertos y los no licenciados, escaseaban los braceros. Ninguno de los manchados se atrevió a acercarse a mí. Me ajusté a mantenido, por cien duros los 90, días en casa de los Cañibano Mazo. Trataban muy bien a los obreros. Si caían malos les daban leche y les pagaba igual el jornal. A los mozos de año de toda la vida en su casa, cuando ya no valían, si no se habían muerto, los entretenían de perillanes para que no les faltara la comida.
  
Tres mozos y tres agosteros hicimos aquel verano, casi todos recién licenciados. No nos faltaban las discusiones y bromas de las que yo era la agradable víctima: A mi sólo me quedaba lo de Guadalajara que, además, los de enfrente eran italianos, pero menudo cachondeíto con lo de “no pasarán”. El trabajo era alegre, redentor. ¡Había tanto niño, tanta mujer, tanto anciano esperando ese pan que recolectábamos...!. La relación entre amos,  criados, criadas, cachicanes,  era fraterna y la alegría indisimulada.  A mí empezaron a llamarme “Capitán”, aunque apenas si pasé de cabo.

        El día  de Nochebuena, puesto que no me obligaban, decidí ir a Misa del Gallego. Mi madre nos llevaba de niños. Además el mensaje  de paz del hijo de María y el Carpintero, ¡sintonizaba tanto con mi estado de ánimo.........!. Cuando volvía de adorar al Niño (el Cura al dármelo a besar me había sonreído), descubrí en su reclinatorio,  lo más bonito de mi vida: el rostro, los ojos, la sonrisa de Rosario.

Era la mayor de las tres hermanas de Ricardo (a quien, antes de pasarse, yo había salvado, y luego su padre a mí) la que le seguía. En los cuatro años había pasado de niña a mujer. Había madurado como espiga sin argaña. Su dulzura realzaba su belleza pálida. En el 37 marchó a curar heridos en los frentes nacionales. Recién había llegado.

Al día siguiente se abrió el baile y, aunque de alivio, fue, con las amigas. Al enlazarnos para bailar, aun curtidos por una guerra, éramos dos niños temblorosos. ¡Con qué ganas se hubiera refugiado a llorar sobre mi pecho....! En el baile no lo hizo, pero sí al salir en el primer rincón que encontramos. Con mis brazos  y la pelliza, cobijé su estremecimiento.

A sus padres se les abrió el cielo con nuestro noviazgo. Despreciaron el comentario de la vecina sobre que yo era de menos categoría por ser jornalero y ella pastora. Nos casamos a la primavera siguiente. Suplí al hijo que les faltaba.


    

jueves, 27 de diciembre de 2018

EL COLMO DE LA INEFICACIA


   De acuerdo con mi navideño estado de ánimo, pensaba continuar con las REMEMBRANZAS y un CUENTO DE NAVIDAD, pero entro en Facebook, leo el mensaje de Natalia (quien gracias a Dios que existe) y me cabreo.

    Pero, ¿cómo es posible que sigan con el proyecto de construir un costoso edificio, presupuesto en 500.000 euros para Centro de Salud, cuando lo que necesitamos son sanitarios en el actual? ¿Qué forma de tirar nuestro dinero es esa?

    El actual edificio cumple perfectamente su función. Nadie queda sin atender, o mal atendido, por falta de espacio. Incluso está la sala de enfrente, que antes se utilizaba como de espera, sin utilizar. Las salas de consulta son espaciosas. Hay sitio para todo. Además: cada vez somos menos (menudo paso lleva esto) habitantes en la zona. ¿Para qué ladrillo y mas ladrillo? No aprendemos del pasado reciente

    Ahí está el "Miguel Cervantes" y el edificio de al lado, donde estaba el Juzgado y la biblioteca, infrautilizados. A propósito de Juzgado. ¿Para qué tanto edificio si apenas se utiliza la mitad?  Y veremos...

     ¿Cuántas veces a lo largo del año se utiliza el Sindicato, por ej., y la Iglesia de San Pedro?

     Los Colegios Comarcales de E.G.B. construidos en los setenta: el de Villanueva, nunca, ni en sus mejores tiempos, cuando acudían cerca de cuatrocientos alumnos, se ocupó la planta tercera. Ahora no sé si dos aulas en un C.R.A. Y los de Belver, Villafáfila, igual, grandes edificios vacíos.

    Y, mientras parece que hay dinero para gastarlo a lo bobo, en edificios innecesarios, no lo hay para pagar más a los médicos, y para más médicos. Cerecinos y Villalobos van a estar unos cuantos días sin sanitario.

     En toda la provincia están surgiendo protestas por la desatención sanitaria, y ¡ala!: eurazos, para luego hacerse la foto de la inauguración.

     ¿Los 79.593 EUROS gastado en el proyecto? Puede quedar ahí para cuando encontremos petróleo y se triplique la población en la zona.

     Tiene razón Natalia: es necesario volver a movilizarse ya.

    

   

martes, 25 de diciembre de 2018


                    REMEMBRANZAS y JUANITO DE PRADA.


De las Navidades de mi infancia me queda el regusto de la fraternidad. Puede que la memoria tienda a idealizar esas fechas en las que parecía imponerse la bondad.
Foto del pueblo: salvo las casas de la carretera de Madrid, todas las demás estaban dentro del perímetro de las Cercas de Santa María, Santiago, San Pedro, Calle Olleros y carretera de Rioseco, apretajudicas, como para darse calor, unas contra otras las de los jornaleros, pastores, hortelanos y pequeños labradores-. Sólo en la plaza había una de tres plantas, donde estaba el teléfono.
Densidad habitacional muy mal repartida; dentro del recinto dicho existían solares, con una, o ninguna, vivienda. Las veinte y pico clarisas, ahora ocho, tienen una manzana entera para ellas, en la que estaba incluida, además del caserón de convento, la huerta, cuadra, pocilga, gallinero. Las Escuelas de Villa con su patio y los restos del Convento de Santo Domingo, convertido en cárcel, después el “Cuarto Churro”, otra manzana sin casas.
La manzana entre la calle de la Fuente, frente al convento, Silera, Angosta y un trozo de la Ronda de Santiago estaba ocupada en el noventa por ciento, por la casa, cuadras, cabañales,… de los Curreros y un herrenal tapiado que mi familia permutó con Nino Allende. Es donde ahora está la casa de Julio, Celeste y la de Javi Núñez. Adosadas a esa superficie estaban las casas de las “Cabritas” y Carrisia en Silera. Luego, a la vuelta cuatro o cinco casicas pequeñas, pues la de Lola y Tomasín Allende, también ocupaba un buen solar en el que pudo incluso construir, además de cuadra para vacas, nave para pollos.
Entre las Cercas de San Miguel, calleja del Velón y calle Olleros había un herrenal, que compró el Sr. Manrique a Fernando el de la luz, ahora urbanizado.
Más las iglesias, el Sindicato, el Ayuntamiento… Luego, en el resto, fíjense que juntica estaba la gente, los dos mil ochocientos entre niños, jóvenes, (mayoría) de media edad y los pocos viejos las mulas, ovejas, marranos, gallinas y conejos; pajares, tenadas…
¿Calles mal asfaltas?: las cuatro del centro; en las demás, como dos, o una acera. Casas de barro, calles de barro, polvo en verano, carámbanos en invierno;  tobas en muchos techos; la lumbre de paja, unos palicos y estiércol; los cántaros, la palancana, el orinal; no en todas, la camilla con sus faldas y el brasero de cisco.
La vida en el pueblo se concentraba entre la Plaza Mayor y la de San Nicolás. La mayoría de la gente, al revés que ahora, vivía de la mitad del pueblo p’allá, hacía las Tenerías.
Asocio mis recuerdos de las Navidades infantiles a cómo se animaban las tiendas; en la calle Amargura, entonces la más comercial del pueblo: el bazar de “Las Lizondas”, Agustina y Antonia, donde también cargaban los Reyes Magos; la panadería del Sr. Benigno, siempre calentita, concurrida y con olor a rosquillas; la mercería de Claudio “Santines”, donde de moza, Lola, la de Abundio, cogía raleras a las medías.
Un poco más adelante, pasado un corral de Amadeo, estaba la tienda de mi tío Demócrito. Hoy casa de Elicio Sánchez. Su hijo mayor, Julián, era mi padrino. Por eso, de vez en cuando, al pasar de la escuela, me daba un caramelo. Puede fuera la de más venta del pueblo: FERRETERÍA (puntas, rejas, dentales, vertederas de arados, balancines, sogas, calderos, herradones…; traía el “yerro” de Urbón en Rioseco, otro primo de joven, Jesús “China”) y  COMESTIBLES: aceite, de oliva, que no había otra, a granel. No sé cómo llegaría hasta las dos zafras grandes de chapa que tenía junto a la escalera. Para despacharla usaba un medidor transparente movido por una manivela. De casa llevábamos la zafra o aceitera. Un litro era todo lo más que se compraba. ¡Menudo precio! Se racionaba para el aliño de la lechuga, ababanjas y aceitunas, éstas con vinagre, pimiento y aceite. Para cocinar, la manteca del marrano, o sebo.
Además de aceite y azúcar en la tienda de mi tío Demócrito, se podía comprar arroz y latas de conservas. Todo lo que fuera limpio, y a granel, envuelto en papel de estraza.
Esquina a Amargura y San Nicolás, estaba  la tienda de “El Grillo”, no Ramón, sino el otro mayor. Creo se llamaba Luis, ella creo que era hermana de “Las Pitinas”, donde vendían pescado, fruta, comestibles..., y cromos de futbolistas para pegar en el álbum. A quien consiguiera completarlo le darían un balón de reglamento, que colgaba reluciente de una redecilla en el techo. Ni siquiera Félix “Nitro” lo consiguió aunque era quien más negociaba con los “repes”. A quienes conseguimos casi completarlo, al final a todos nos faltaba “Lesmes”, uno del Valladolid.
Tirando por Zarandona teníamos, a la derecha, hacia la plaza la Tienda de Lucila, también de comestibles y licores. Al otro lado estaba la de Pilar, la de “Capucha”, que abría los domingos, porque además de comestibles, y sobre todo, vendía los “chuches” de entonces: pipas y caramelos, adonde iban a para los dos reales de la propina de todos los muchachos.
También en esa calle, todavía los muy jóvenes, recordaran, en casa y cuarto pequeños, la droguería de Brillantina. Entonces pinturas, y menos papel de pared, poco se vendía. Si, en cambio, mucho almazarrón y anilina. También colonias, fijadores de pelo y brillantina
En la plaza, ¡cómo no!: “los Pedros” (Ernesto y Manolé),  ultramarinos y algo de ferretería, y el ¡Comercio Grande! (Luis, Isaías y Baldomero). Fundando en 1850 era el comercio de la zona: tejidos para sastres y modistas, mantas de cama y campo, sábanas, más tarde ropa confeccionada…; también, en la otra puerta, ferretería, en competencia con Demócrito. Incluso hubo años, cuando el racionamiento, que vendían comestibles. Cuando Baldomero, el último se iba sintiendo mal, tiró no sé cuántas cartillas de racionamiento al contenedor de los Corralones. Cogí unas cuantas. Alguna conservo.
En las Angustias estaba Isaac. Vendía útiles para las labranzas: trallas, varas de fresno,  bieldos, tornaderas, redes de acarrear…; también bicicletas y todo el repuesto, más escopetas y cartuchos de caza.
Y llegamos a la última, la de “los Pedros de Santiago”, milagrosamente superviviente de los embates de los “DÍAS”, “LUPAS”, ALIMERKAS, incluso de “Ámazon”. ¿Qué les voy a decir? Un acierto lo del calendario. Un homenaje que se merece Juanito, un santo, la persona más humilde y buena del pueblo, quien a nadie ha dejado nada a deber y si en cambio bastante a él.
De siempre, fue la más variada. Vendían telas, ropa, botas, hilos, lanas, puntillas;encajes,  puntas, chinchetas, clavillos, martillos, llaves de tuercas, pasadores, picaportes, telas metálicas, carretillos, purrideras, cristales, cuchillos, navajas,  alambre para lazos a conejos, ratoneras, pajareras hasta que las prohibieron.. Parecía como si hubiera habido un acuerdo entre los demás comerciantes para dejarles a ellos en exclusiva el escabeche a granel, bacalao (las bacaladas que tendrá cortadas esa cuchilla) aceitunas, cacahuetes, nueces, aguardiente, latillas de conserva, coñac; pimentón, azufre, piedra lipe,  tripas para los chorizos...
Juanito, además del calendario, se merece que vayamos, de vez en cuando a comprarle algo. Servidor no ha mucho unas botas para el campo.
Entrar en esa abirragada y lóbrega tienda,  es disfrutar del lujo de remontarnos a nuestra infancia. Juanito es el último de la estirpe de los carballeses de Muelas, (los de la señá Petra, los del Comercio Grande) de Donadillo, (los Pedros dichos) gentes tan sobrias como honradas.


miércoles, 19 de diciembre de 2018

YA NO MÁS.



,                                         ¡BASTA Y REQUETEBASTA YA!

¡Basta de crímenes, basta de violencia, basta de impunidad con los malvados! Al tiempo de la indignación y tristeza que nos producen estas muertes atroces, ese tronchar vidas en flor, clamemos por la justicia. Peleemos para que esos repelentes individuos (el Montoya este es un prototipo del macarra abyecto) sean apartados de por vida de la circulación.

Ese buenismo del “progre”  pensamiento único de la reinserción  de las bajas condenas, de tanta impunidad contra el delito, choca con  una evidencia, de la que ya hasta existen pruebas científicas, según nos demuestra en ·Neurología de la maldad. Mentes depredadoras y perversas”, el Catedrático de Siquiatría,  Adolfo Tobeña. Esa evidencia es la existencia en la especie humana de un porcentaje, no pequeño, de malvados, (se les puede ya detectar en la infancia) insensibles, dañinos, carentes de empatía, de compasión, de remordimientos de conciencia, fríos, con propensión a la criminalidad en la que existe una alta carga genética.

Esos individuos no obedecen a estímulos positivos. Al malo ya le puedes sermonear. Esos individuos sólo se inhiben ante el temor al castigo. Y no se reinsertan. Casi siempre vuelven a las andadas. “La cabra siempre tira al monte”. Pero si hasta se ha descubierto el gen de la maldad.

Todos los días conocemos casos de reincidentes, de los que la vuelven a preparar al poco de salir de la cárcel, como en el caso del criminal éste.    

Oigo esta mañana en la radio la repetida tontuna de que no se debe legislar en caliente. Pero si cada poco tenemos una calentura. Ahora es la encantadora Laura Luelmo, pero la semana pasada fue la sentencia, cinco años, al asesino de Leticia Rosino. ¿Se les ha olvidado ya Gabriel Cruz, Diana Quer, Marta del Castillo,… las niñas de Alcaser, y otros muchos crímenes, si no tan mediáticos, si igual de reprobables.

¡Basta ya!: es necesario combatir a la VIOLENCIA, a toda, de género o no género. Cierto que las mujeres jóvenes son las víctimas propiciatorias de estos desalmados. Cierto que otras mujeres sufren violencia hasta el asesinato, a manos de sus parejas, o ex; pero también cierto que entre las víctimas también hay niños, personas mayores o de cualquier edad indefensos ante agresivos violentos, que si no matan de buena gana lo harían. Conozco casos próximos. Es necesario repudiar todas las violencias.

Es necesario endurecer las leyes, son necesarios jueces más justos, que no archiven denuncias sin investigar. Unas cuantas de las mujeres asesinadas ya habían presentado denuncias que se habían archivado.

Los esfuerzos de nuestras magníficas fuerzas de seguridad, Guardia Civil y Policia Nacional, sobre todo, chocan con la cierta laxitud de la justicia y con el dañino buenismo de los políticos “progres”. ¿A cuántos delincuentes no han apresado que entran por una puerta del Juzgado y salen por la otra?

¡Horrible, horrible, horrible!: ya que  a Laura, a Leticia, a Diana, a Marta…, no les podamos devolver la vida, evitemos siga engrosándose la lista.
                                                                                                     

MIEJAS: Descanse en paz.



      No he  escrito reseña de los últimos fallecimientos. Sí que he acompañado a los familiares en toda la liturgia, y he compartido, de verdad, su tristeza con hijo e hijas. Si me retraigo de hacerlo es por prudencia, por la susceptibilidad de algunas personas, que luego me dan quejas.

      Pero sí quiero recordar al  "Miejas" porque éramos casi quintos, porque fuimos a las mismas escuelas, al mismo juego de pelota, jugamos al fútbol en las mismas eras, y a las chapas, canicas y otros juegos en la plaza.

     Porque quiero elogiar el comportamiento con él de sus hermanos, los del pueblo, Antonio y Almudena, y el pequeño, Ángel Luis, fuera.

     Se llamaba Lorenzo (como su padre, "Remolino") Allende Alonso, pero aceptaba de buen grado lo de "Miejas", pues aunque era pequeño y menudo, como su madre, Cruz, la "Gatera", no por ello dejaba de ser bien parecido y chulillo

    Fue de niño muy popular en el pueblo por ser el "rapsoda" de los refranes a San Antón, el diecisiete de enero.

   Se llenaba la iglesia de San Pedro. Era día de medio fiesta, porque había escuela. Decían la Misa a las doce y media, para que al salir, cuando echaban los refranes, ya estuviéramos todos los muchachos.

   Un gran gentío se agolpaba en torno a la burra desde la que "Mieja", con mucha gracia, peroraba los refranes, que eran versos irónicos contando los sucesos del año, "sacados" por el Sr. Luciano y después por su hijo, "Luci" "El Tobo". Socorro "La Toba" era su madrina. Recuerdo uno que comenzaba así:

     "¡Calma señores, / que no soy una perla / no tenga que intervenir / el famoso Carapela!

      "Carapela" era Ángel Caramazana el entonces guardia municipal, sin uniforme, pero siempre, en todas las aglomeraciones poniendo orden, como por ejemplo en la cola para sacar la entrada del cine, con una "varita de mimbre en la mano" , que se la prestó Antonio Heredia.

    Tenía una preciosa voz e imitaba a Antonio Molina: -"Serranía, serranía, en mi caballo lucero, yo rondo la serranía..."

     En unas comedias que echaron los de A.C. en Quintanilla del Olmo, lleno el teatro.panera hasta arriba, el fin de fiesta consistió en un duelo flamenco entre Loren y Manolo, hermano de Leo Quesada, que entonces vivían en ese pueblo.

    No sé si con la mili ya cumplida o no, como casi todos, emigró. Un hermano de su madre, hombre de gran inteligencia, técnico electrónico cuando nadie sabía ni arreglar un enchufe, tenía un alto cargo en Standar Eléctrica. Ni sé a la gente de Villalpando que colocó.
   
      Desconozco el resto de avatares de su vida hasta que, creo que pre jubilado, regresó al pueblo, al regazo de su madre, y al amparo de su hermano Antonio "Gatero".

     Andaba siempre hecho un pincel, con corbata a diario, pulcro y elegante.

       Cuando murió su madre, venía cada poco por la floristería, puede que todas las semanas:: -"Dame unas flores Sarita para llevarle a Crucina".. Ahora le ha llevado a él mismo.

      Ha pasado bastantes de sus últimos años en la Residencia, muy bien cuidado y atendido. Cada día recibía la visita, sin faltar ni uno, y la alegría de su hermano Antonio. Ha sido su ángel de la guarda. También de la monjica enfermera, Sor Mª Jesús, a  quien echó  mucho de menos, tan necesitado como estaba de afecto.

    Amigo "Miejas", descansa en paz.
    

     

sábado, 15 de diciembre de 2018

HEMEROTECA.



      Pospongo el relato sobre un imaginario Castrovilla, para copiar una información aparecida en el periódico anarquista, de tirada nacional, llamado "Campo Libre", referida a Villalpando.

    Ya les advierto que el artículo está escrito con el lenguaje incendiario de  aquel entonces, mayo de 1936, que contiene exageraciones, como la de que los terratenientes gastaban mucho dinero en vestir santos, y que nada tiene que ver la Guardia Civil y la Audiencia Provincial de ahora con la de aquellos momentos.

    Hechas las anteriores salvedades, la información de fondo, es cierta: el robo por hambre, en la panera de La Maragata, de unas fanegas de trigo. Ese hecho está contado en "La otra historia de la villa", incluso transcribiendo la sentencia a la que alude. También fue cierto el crimen del Presidente de la CNT en Villalpando, Francisco Gallego, "Tano". Cierto que a los autores del crimen, dos, no uno, los pusieron pronto en libertad, mientras que  los autores de la sustracción, cuando escriben este artículo, estaban en la cárcel. Y dos salieron de ella para llevarlos al paredón..                                                                                                                                                      Sé también que la mujer de uno de los condenados, de Gerardo Arribas, al verse con cuatro niños pequeños y sin el jornal del marido, encarcelado, hubo de llevar a los niños al Hospicio.

     No viene mal, de vez en cuando, sin ánimo de ofender a nadie, recordar  también esta  "Otra historia de la Villa".

          Primero pueden leer la columna de la izquierda, y en la copia de abajo leen la columna de la derecha.



viernes, 14 de diciembre de 2018

NUEVA RESPUESTA DESDE LA PRESIDENCIA DEL GOBIERNO.




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Estimado Sr. Modroño Alonso:

Le agradecemos el nuevo escrito que ha remitido a la Presidencia del Gobierno, en el que expone sus comentarios y sugerencias en materia de vivienda, que hemos leído con interés.

Al hilo de sus consideraciones, nos gustaría remarcar la prioridad que este Gobierno está dando a las políticas de vivienda. De este modo, el Ejecutivo ofrece a todas las fuerzas políticas un pacto de Estado donde se engloben y se puedan consensuar medidas que garanticen el derecho efectivo a una vivienda digna.

En este sentido, le comunicamos nuestra determinación de elaborar una nueva Ley de Vivienda que pretende garantizar la igualdad de todos los españoles en el derecho constitucional de la vivienda, con independencia de la Comunidad Autónoma en la que residan, blindar su función social y promover y proteger jurídicamente el parque público de vivienda en España en colaboración con el resto de Administraciones del Estado.

Asimismo, estamos estudiando fórmulas para aflorar al mercado del alquiler viviendas vacías, para lo que se contemplan incentivos y ayudas a la rehabilitación a las que podrían acceder los particulares.

También queremos promover la modificación del Plan de Vivienda 2018-2021, la reformulación y el incremento de los programas de ayudas, la revisión de los protocolos de actuación en caso de desahucio para que los afectados tengan siempre cobertura social y para dar soluciones habitacionales urgentes a las víctimas de violencia de género.

En esta misma línea de actuación, le indicamos que el Gobierno desea poner especial énfasis en el fomento del parque de vivienda pública de alquiler, ya sea mediante la rehabilitación del parque ya existente, la promoción de nuevas viviendas, especialmente en suelo público, o la adquisición de viviendas por las Administraciones Públicas con este objeto. Estas viviendas, que se destinarán por largo tiempo al alquiler o a la cesión en uso, tendrán una renta o precio limitado y se destinarán a personas con escasos recursos.

Igualmente, pretendemos acometer la mejora del marco regulatorio del alquiler. Así, vamos a impulsar diferentes actuaciones como elevar la prórroga forzosa de los contratos de arrendamiento de tres a cinco años; limitar las fianzas adicionales que el arrendatario tiene que prestar para alquilar la vivienda; la mejora del régimen fiscal de la vivienda, que contribuya a estimular la oferta de vivienda en alquiler, a la moderación de los precios o a la rehabilitación edificatoria; y ajustar la definición de arrendamientos de temporada para excluir de la ley de Arrendamientos Urbanos a la vivienda turística.

En cuanto a sus consideraciones en relación con la despoblación de zonas rurales, le aseguramos que este Gobierno está plenamente comprometido con emprender diversas acciones que, en nuestra opinión, deben ser una cuestión de Estado, para hacer frente no solo al fenómeno de la despoblación al que alude en su comunicación, sino para integrar de forma más precisa el conjunto de los territorios de España, especialmente aquellas zonas más envejecidas y masculinizadas.

Fieles a esta línea de trabajo, impulsaremos actuaciones orientadas a promover una mejora de las condiciones de vida de sus habitantes y a la creación de empleo en estas zonas, facilitando el relevo generacional y avanzando en la igualdad de género.

De esta manera, haremos especial hincapié en la incorporación de los jóvenes y de la mujer a la actividad agraria. Queremos, a su vez, abordar una estrategia de digitalización e innovación del medio rural, con el objeto de que las posibilidades sean las mismas y de que no exista una brecha entre lo urbano y lo rural. De hecho, se destinarán 57 millones de euros a impulsar los grupos operativos y proyectos innovadores, en el marco del Programa Nacional de Desarrollo Rural. En paralelo, se va a continuar con el plan de extensión de banda ancha en las zonas de baja densidad de población, y con el desarrollo del plan de territorios rurales inteligentes.

Aprovechamos estas líneas para recordarle que, como seguramente sabe, la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) elaboró en 2017 el Plan Nacional contra la Despoblación, tras meses de trabajo técnico y político, con la colaboración de ayuntamientos, diputaciones provinciales, consejos y cabildos de todo el país.

Todas las administraciones públicas con competencias en la materia trabajan para llevar a cabo las cerca de 80 medidas reflejadas en el Plan y que se agrupan en seis líneas estratégicas: economía y empleo, servicios públicos y sociales, infraestructuras, comunicaciones y transporte, vivienda, incentivos demográficos y apoyo al medio rural en materia de cultura, identidad y comunicación.

Permaneciendo a su disposición para los asuntos que desee abordar, le hacemos llegar un cordial saludo,

Departamento de Comunicación con los Ciudadanos
Gabinete de la Presidencia del Gobierno
Edificio Semillas - Complejo de La Moncloa
Avda. Puerta de Hierro s/n - 28071 Madrid 



miércoles, 12 de diciembre de 2018

II PARTE DE LA ENTRADA ANTERIOR.



      Saben que en este blog hay espacio no sólo para la crítica, sino también para el elogio.

        Y muy justo es el que hemos de hacer a la Asociación Taurina Astauvi, organizadora del "Toro de la Purísima". Este año un éxito rotundo. Un acierto echar arena en la plaza.

       Por la mañana soltaron un novillo algo rojico que dio un juego extraordinario. Lo mismo las vacas y el otro toro, más grande que soltaron por la tarde. Procedían de la ganadería segoviana de un yerno de Miguel Granado Boyano

      La plaza estaba a reventar, como en los mejores momentos de San Roque. Creo que incluso había muchos más jóvenes, los cuales, dado que en los pueblos de por aquí hay pocos, llegados de más lejos, de toda la zona de la provincia de Valladolid  (Rueda, Serrada, la Seca, Villafrechós,,) donde son tan aficionados a los recortes; de Toro, Benavente,... Como es un día en que no hay toros en otros lugares, pues todos a Villalpando.

     ¡Cuánto! sentí no poder asistir a la conferencia sobre las Cortes de Cádiz, sobre aquel primer intento (duró poco por desgracia)  de Constitución de 1812, y sobre la figura de uno de sus ponentes, el zamorano Juan Nicasio Gallego, pronunciada por quien más sabe de esto en España, el doctor en Historia, Eduardo Fernán-López, un muchacho muy buen mozo, hijo de Marcelino, de los Amadeos.

    Pregunté en la tertulia de la puerta villa y me dijeron: "habla muy bien ese muchacho; lo malo es que casi no se le oía, porque están muy mal los altavoces". En el salón todas las sillas ocupadas y bastante gente de pie atrás y por los lados. ¡Pues qué bien! ¡Me alegro!

                                ------------------------------

     Como nos quedaba pendiente hablar de la Constitución y la Justicia, vamos con ello: recordamos que el ansia de JUSTICIA es algo inherente a la conciencia de las personas buenas, y que lo dijo el de Nazaret. Pero junto a eso (creo se ha imprimido en los genes por tanta barbaridad cometida por "tribunales" a lo largo de la historia: Gran Sanedrín, Santo Oficio, Tribunales Militares y Populares en la guerra civil, Tribunales de Orden Pùblico en la dictadura..) existe un miedo ancestral a los jueces y juezas. Con la justicia y la Inquisición, chitón, decía mi abuela. Y no es para menos. En la práctica los hay omnipotentes y prepotentes que pueden desgraciarle la vida a cualquiera. Miren el caso de Pérez Estevil, hasta que fue inahabilitado. Cierto que por encima de las instancias inferiores están las superiores que, cuando una sentencia es injusta, la corrigen, revocan, le dan la vuelta, pero no así a las humillaciones, se dan casos, que puedan inflingir a los juzgados.

    ¿Da la Constitución española ese poder "divino", omnipotente a jueces y juezas?  ¡Pues no! Art. 117 de la Constitución Española" Jueces y Magistrados (el lenguaje sexista no es cosa mía) son independientes, inamovibles, responsables, y, pero, sometidos únicamente al imperio de la Ley. No podrán ser separados, suspendidos, trasladados ni jubilados, sino por alguna de las causas y con las garantías previstas en la Ley.

     O sea: están sometidos al imperio de la ley y pueden ser separados, suspendidos, etc. por alguna de las causas    y con las garantías previstas en la Ley.

      A partir de la Constitución fueron apareciendo las leyes de la democracia. La que regula todo el funcionamiento de la justicia,  la Ley Orgánica  6./1985 del Poder Judicial, le dedica todo un capítulo, el III, desde el artículo 414 al 427 al RÉGIMEN DISCIPLINARIO JUDICIAL, a la RESPONSABILIDAD DISCIPLINARIA. Ahí se tipifican las faltas que puedes cometer jueces y magistrados (suponemos que también juezas y magistradas); graves, muy graves y leves. Por ej., condenar a un inocente, (probado que lo era)  suponemos es falta muy grave.

     Ochenta y cuatro jueces han sido sancionados, separados de su cargo, desde 2009, algunos de mucho renombre, como Baltasar Garzón, antes lo había sido Javier Gómez de Liaño. Si bien dudando que, en estos casos, fuera justa la separación.

     Como la justicia es pilar fundamental de la democracia española,(todos los días hay noticias de tribunales), como lo es la libertad de expresión, Art. 20 de la misma, siempre que sea veraz, como es mi caso, cuando se da información, quieren mis reflexiones ayudar a que ésta quede limpia del todo, a que no se levante un poco la venda para ver quiénes están en los platillos de la balanza.

    Pretende el pequeño relato literario que viene a continuación afear posibles actuaciones. Ya saben: la ficción literaria, es eso: ficción, pero para que sea verosímil ha de tener algunas apoyaturas en la realidad. Por ej. en "Patria": al "Chato", Bittori, Miren, Josecho, Arancha, José Mari, Nerea, don Serapio... los estoy viendo en la realidad.

     Lo que voy a contar ocurría en Castrovilla,pueblo sacado de la novela "Tierra de Campos" original del regeneracionista vallisoletano Ricardo Macías Picavea.

     Como no quiero cansarles, el cuento lo dejaremos para el próximo capítulo.

    

martes, 11 de diciembre de 2018

LA CONSTITUCIÓN Y LA PURÍSIMA o la purísima Constitución.


       El pasado fin de semana he vivido de lleno, consultándola, para intentar que se cumpla, la celebración de la Ley de Leyes.

       De la otra fiesta, tan importante, la de La Purísima, ya se lo cuenta todo en abundante reportaje fotográfico, La Opinión de Zamora. Les confieso que ha menguado mi fervor de hasta no hace tanto. Ya saben: la utilización de unos sentimientos tradicionales para el manoseo  y el provecho político. Ya saben: la falta de valores, no solo Cristianos, sino cívicos y morales de tantos de los participantes en la procesión, presidida por las autoridades militares, civiles y religiosas, y menos mal que no fueron los "Quintos" con sus bombazos. Sé que existen personas a quienes les parece bien, porque es una tradición, porque le da solemnidad. Lo malo es cuando los presididores no son ejemplares.

      Ya de joven, dentro de nuestro Cristianismo militante de  Acción Católica (hay que ser tan malo como ignorante para  reprocharme en el periódico cuando la reprobación, haber pertenecido a ese movimiento) deseábamos la desaparición de las connivencias entre la Iglesia Católica y el régimen. Y estas reminiscencias, esta mezcla entre lo civil y lo religioso en la actualidad es una  antigualla que no se tiene en pie, y en vías de extinción. Ya ni siquiera vienen todos los alcaldes de los trece pueblos. Elogiosa la presencia de alguna alcaldesa proletaria, vestida con la sencillez de su clase.

      Ya va siendo hora de separar lo religioso de lo civil. ¡Todavía lo que tiene tradición...! Pero lo de la  "ofrenda floral" de los quintos a la Virgen, es una moda reciente, sin justificación. ¡Todavía si guardaran las formas y fueran respetuosos con la ceremonia religiosa, con las creencias y el indudable fervor de quienes asisten a la Novena...!

      Siete de diciembre pasado. Víspera de La Purísima. Fiesta de los quintos, ahora que ni los tallan ni es obligatorio el servicio militar. Fiesta no tradicional. La tal lo era en la Noche Vieja, y madrugada nueva del año anterior en que  entrábamos en quinta, cumplidos los veinte años. Consistía en andar haciendo el gamberro por el pueblo: tocar la Queda y tirar unos pocos de aquellos cohetecillos de antes de "chis púm". Y, si nos pasábamos, acabar en el Juzgado. Por supuesto que todas las niñas en la cama. ¡Bueno sí!. ¡quintas en aquellos tiempos..!

      Volvamos al pasado día siete. Pues es moda creo de este Ayuntamiento, para civilizar a los quintos que, en los tiempos de Carmen se pasaban toda la noche soltando bombazos y embadurnando las fachadas, creo para civilizarlos, integrarlos en la fiesta. Se ha conseguido algo muy positivo: que dejen de martirizar por la noche a quienes, la mayoría, necesitamos dormir. Y ya no  embadurnan fachadas. Positivo.

      Pues encienden antorchar en el Ayuntamiento y con ellas desfilan hasta la hoguera y la prenden. También, parece ser, repartes sopas. Pero, antes de eso, van a la Novena a llevarle flores a la Virgen.

     Como ahora son quintos y quintas, y se suman los no residentes, la mayoría, hijos o nietos de villalpandinos ausentes, pues este año andaban por los treinta. Anduvieron desde el mediodía por las calles del pueblo con una charanga desafinada y lanzando ni sé las docenas de cohetes de gran potencia. De esos que asustan si no se esperan.

     Se les hizo tarde para ir a la Novena. Se presentaron poco antes de la Consagración. Ángel, el buen párroco, parece ser, me lo han contado, paró la Misa. Puso un jarrón en la vera del altar, cada uno fue dejando su rosa. y volvieron al sitio, bancos de la izquierda, donde se habían sentado nada más entrar, sin santiguarse ni nada.

    Dado que, ni siquiera por respeto al resto de los fieles, guardaban la compostura, don Ángel les admonestó. "Que para estar en la iglesia de esa manera era mejor se salieran. Estuvieran fuera".

    ¡Pues se salieron! Todos menos dos. Quienes siguieron la ceremonia con dignidad: una chica, (no la conozco, pero por el detalle me resulta digna hija y nieta de tales padres y abuelos). Magdalena de la Puente y su marido, Alejos e Isabel Morales;, y un muchacho encantador, Hugo,  hijo de nuestra sobrina Inma Miranda, nieto de Cesáreo y de Rosi. Aunque sea manido me agarro a pensar que su abuela le sonreía desde el cielo.

    Creo deberían suprimir esto de la ofrenda floral de los quintos. Salvo excepciones, estos chicos de la Logse, de la Educación para la Ciudadanía, son poco respetuosos con los sentimientos ajenos.

     Les prometo en próxima entrada seguir con la justicia y la Constitución y otras leyes que nos hacen a todos los ciudadanos iguales ante la ley, y consagran que los jueces no son ni divinos, ni omnipotentes, aunque lo parezcan.

.P.D. Que, a pesar de los pesares, todavía me emociono con el "Villalpando y su tierra gloriosa", Que le he cantado a Sari, "Viva la Virgen nuestra patrona"; que recuerdo, "Oye mis clamores" y "Señora a tu templo"; que me perdura el sentimiento de mis mayores, y recuerdo con emoción tanta ceremonia sincera con don Tomás en la Iglesia de San Pedro.


domingo, 2 de diciembre de 2018

PATRIA.



   Por haber acabado de leer, en ocho días, esta inmensa novela-relato, pospongo la  II parte del capítulo que voy a dedicar a la justicia.Detesto las novelas de ficción pura y dura que no tienen un asidero de hechos reales, y que nada me van a aportar en el aspecto de las virtudes humanas, más conociendo a los autores, tan carentes de ellas.

    He esperado para leer "Patria" a que estuviera "mi casa, alma sosegada", pues me temía iba a revolver tanto poso de dolor como nos dejó la barbarie irracional de la banda terrorista vasca. Podría enumerar de memoria todo su horror.

    Tras el capítulo del asesinato del "Chato", (un pequeño empresario trabajador, hecho a sí mismo, un hombre bueno) cuando Nerea,  su hija, estudiante de Derecho en Zaragoza, adonde su padre la había mandado para protegerla de las amenazas de los "aberzales" , se niega a acompañar a su madre y a su hermano en esos momentos de dolor, para no ser reconocida al salir en los informativos, fuera de su pueblo, como hija de la víctima, digo que tras ese capítulo estuve a punto de abandonar la lectura. ¡Menos mal que no lo hice!

    El autor, Fernando Aramburu, emplea una técnica literaria, cinematográfica, diría yo: escasa narración y abundantes diálogos. Incluso cuando narra traslada diálogos. Escribe de forma lacónica: frases muy cortas, a veces formadas por una sola oración gramatical, y simple. Con frecuencia, preguntas de una palabra, para con la consiguiente respuesta resumir hechos, situaciones, con un gran ahorro de lenguaje.

    Consigue con ellos, a base de pequeños flashes, retratos físicos, y sobre todo psicológicos, de los personajes. Es una novela-narración muy psicológica.

   ¡Claro!: en las situaciones de conflicto (las guerras, por ej. y el terrorismo) es cuando afloran los rasgos de la personalidad de las gentes, cuando se ve a las buenas, regulares y malas personas, según su capacidad de raciocinio o de fanatismo; torpeza o inteligencia; odio o compasión; valentía o cobardía; sinceridad o hipocresía...

     Abandono el análisis literario formal del texto, para ir al fondo del asunto que trata: el daño que a una sociedad producen unas ideas irracionales. intentadas imponer a base de terror..

    La gran cuestión, el fondo del asunto es que los de ETA no tenían razón. Ahora ya han pedido disculpas por el dolor causado, también a sí mismos, Se ve en Jose Mari, y las reflexiones de su juventud perdida, por nada, para nada, en una celda.

     Pero sería bueno que toda la sociedad vasca admitiera ese gran error: ETA NO TENÍA RAZÓN. Creo a ello puede contribuir la novela de Aramburu.

    Utilizando un mínimo de raciocinio no se puede admitir que un pequeño grupo, con la extorsión, los secuestros y el crimen, intenten imponer su absurdo criterio a toda una población.

    ¡Vamos a ver!: todavía en los tiempos de la dictadura, podría asistirles cierta razón: el euskera (idioma minoritario hablado sólo en las aldeas) estaba postergado (después y ahora, lo están intentando meter con calzador); no había libertad de expresión en prensa y radio; no había democracia...¡Bueno!: admitamos se organizaran movimientos de protesto, pero nunca matando, sino convenciendo con las ideas.

     Pero es que en aquella sociedad del tardofranqnismo, en pleno apogeo del desarrollo industrial, cuando en el País Vasco "ataban los galgos con longanizas", y como en toda España, no existía una opinión mayoritaria ni un rechazo masivo a la dictadura. Busquen en las hemerotecas y filmotecas y verán como las muchedumbres, a quienes no se puede movilizar a la fuerza, vitoreaban a Franco en Bilbao. Dice el autor que Miren, cuando murió el Caudillo, antes de ser fanatizada por la "Patría Vasca", soltó unas lágrimas a su muerte.

    Y bien: llegó la democracia: amnistía general para todos los presos "políticos", aunque hubieran matado. Todos los de ETA a la calle. Pues es entonces, en los años de la transición, en los primeros de la democracia, cuando aprovechan las libertades para llenar las calles de carteles, de consignas, de patrioterismo, de altercados y disturbios callejeros, para,  "comido el coco" a los más jóvenes, integrarlos en la organización, para fanatizar a tanta población hasta entonces apática o indiferente, para crear, sobre todo en los pueblos, un ambiente de miedo, de enchulamiento de los radicales; para extorsionar, secuestras, torturar, matar. Fueron los llamados años de plomo. Con la complicidad de Francia, rara era la semana sin atentado. Evito enumerar tanto horror. 

     La historia de ETA está llena de paradojas: gran parte de la Iglesia (quien pregona el amor al prójimo y  prohíbe el crimen) Católica Vasca, la protege y ayuda. Muchos curas jóvenes pertenecían a la organización. Hubo unos cuantos presos en la cárcel concordataria de Zamora.

    ETA movimiento de izquierdas que aboga por implantar el "socialismo"totalitario, comunismo, nace  de las juventudes del PNV, partido de la burguesía vasca, por tanto de derechas. Protestan de la dictadura franquista, pero ellos intentan imponer su dictadura. De hecho la impusieron en todos los pueblos, más bien pequeñas ciudades: Hernani, Mondragón, Deva, Lasarte, Rentería...
Paradoja macabra que esa extrema izquierda nacionalista asesinara a Isaías Carrasco un concejal socialista en Mondragón, cuando los de derechas, en el 36 habían fusilado a su abuelo en Morales de Toro.

   Toda la izquierda  española, al principio y mucho después, sentía admiración y simpatía por ETA. Años después, puede pensando que los militares se hartaran (el terrorismo fue la causa principal del del 23-F) fue un gobierno de "izquierdas", el de F. G., quien creó los GAL.

    Les confieso que los primeros atentados de este grupo nos gustaron. Ya era hora que alguien respondiera. En principio creímos que los empresarios, hartos de extorsiones, eran quien lo habían creado. No fue así. El mundo empresarial vasco estaba dividido. A los afiliados y afines al PNV, ni los tocaban.

   Luego resultó que las actuaciones de los GAL fueron chapuceras, sirvieron para que unos cuantos metieran sus manos en el abierto cajón de los fondos reservados, Le costó cárcel al Ministro del Interior, José Barrionuevo, a quien creo inocente, seguro no responsable del todo, y que se tragó el marrón por lealtad.

    No fue  del todo negativa la actuaciòn de los GAL: sirvieron para que el gobierno francés empezara a colaborar en la detención de etarras, quienes andaban por allí como Pedro por su casa. Claro que también sirvió para dar argumentos a los etarras y afines, como cuando la muerte de Lasa y Zabala.

     También explotaron hasta la  náusea "las torturas" que la Guardia Civil, para que  cantaran, propinaba a los detenidos. Me he informado. En ello hay mucha exageración. De todos los modos, si para sacar del entierro en vida a Ortega Lara, por ej. era necesario "achuchar" a alguno de sus carceleros, es justificable.

    La Guardia Civil sufrió en sus carnes, y en la de sus mujeres y niños, heridas, muertes, dolor; obedeciendo órdenes, defendiendo a los inocentes. Algo sé lo que podía suponer para las familias para los  niños vivir en el cuartel de Inchaurrondo. 

   Hace unos años leí en la "Tercera" de ABC la defensa que un Teniente Coronel de la Guardia Civil, hacía de su compañero, Jefe de aquella Comandancia, Rodríguez Galindo. Veo firma el artículo Manuel Villa. ¡Coño!: si este es Manolito, aquel muchacho delgado y moreno, líder de la pandilla de amigos, hijo mayor del Teniente Villa, y le dí la razón.

    Es "Patria" uno de esos libros que ayuda a las personas a ser mejores, más buenas. En que aparecen miserias humanas pero, por encima, virtudes: Está lleno de buenos sentimientos.

     En ese friso de personajes, aparte de uno secundario, que es el más malo, el Andoni empleado del Chato, en todos, como en la vida, hay algo, más o menos, de bondad.

     Hasta en Jose Mari, el protagonista de ETA, pone la reflexión que le lleva a escribir la carta de perdón a Bittori: "Os pido perdón a ti y a tus hijos. Si podría (pudiera) dar marcha atrás en el tiempo lo haría". Y el final de la novela, cuando se dicen ¡hola!,. Miren y Bittori, es un canto al perdón.

     Al leer como aquel muchacho, de joven mozarrón deportista un poco atolondrado , como tantos otros fanatizado por esas ideas del nacionalismo tribal, después de su periplo de sacrificios y sufrimientos personales  y crímenes, tras 17 años en la cárcel, .
acaba por arrepentirse, le entran a uno ganas de que lo pusieran en libertad.

      Ese sería el camino para los que aún están en las cárceles: arrepentimiento sincero, que lo hicieran público, que pidieran perdón, que reconocieran su error de intentar de imponer absurdas ideas por el terror, contra la voluntad de la mayoría; que se alejaran del partido que no acepta esa realidad. Lo que pasa que viendo los caretos del de Juan Chaos, Pakito, el Potros, etc., es misión imposible.

     Y los "progesistas" de la "Memoria Histórica" referida a la guerra civil, acabada va a hacer ochenta años, empeñados en condenar al franquismo, además de hacerlo del Comunismo Soviético, deberían condenar, crear estado de opinión contra los crímenes de ETA, tan todavía echando sangre, y contra quienes  los elogian y defienden.

     Debe ser más fácil sacar a Franco de Cuelgamuros que prohibir las huchas de las herriko tabernas, las fotos , los carteles de apoyo a los presos y  los homenajes a esos "héroes".

     Más fácil, y demagógico, recordar a las víctimas del franquismo, ya desaparecidas, que a las de ETA, con las que convivimos.  

    Y a los del PP, tras tantos años manchando con la corrupción la memoria de sus víctimas, que se regeneren, que honren el sacrificio de  Manolo Zamarreño, de Gregorio Ordoñez, de Miguel Ángel Blanco, de tanto concejal honrado como allí vivió atemorizado, dando la cara.