sábado, 25 de marzo de 2017

BUENAS, MALAS Y REGULARES PERSONAS. ¿QUÉ SE PUEDE HACER?


     Con los que nacen malvados, criminales, dañinos, apartarlos de la circulación. Lo dice científicamente Tobeña, estamos hartos de conocerlos. Ni les influye, como ocurre en algunos casos, ni el buen ambiente familiar, ni el social.

    Recuerdo, por los años ochenta, al famoso Quintas de Zamora. Asesinó, de forma cruel, a una candorosa pareja de adolescentes que estudiaban las aves en el río Duero. Sin más, porque le dio la gana. Aquello me entristeció e indignó al máximo. Por entonces mi hija mayor era una adolescente que estudiaba COU en Zamora.

   Con los años y todo el catálogo de horrores que padecemos, se está produciendo una cierta e inevitable insensibilización,  Si es que todos los telediarios están llenos de sangre. Aún así, en mi caso, les aseguro no me resultan indiferentes, ni los crímenes de los delincuentes comunes, ni los de los delincuentes organizados, todavía más peligrosos, porque intentan justificar sus crímenes sobre inocentes en aras de no sé qué ideario nacionalista o religioso.

   Quedó atrás la pesadilla de ETA. ¡Dios mío, cuánta crueldad!: aquel asesinato del joven y brillante abogado sevillano y su esposa; ya no recuerdo si dos o tres niños pequeños huérfanos; el de Gregorio Ordoñez, y el más inhumano de Miguel Ángel Blanco, después de dos días de angustia, como a un corderico inocente. Y así, hasta cerca de ochocientas víctimas. ¿Para qué? Si aquel sector de la sociedad vasca no hubiera estado enfermo de fanatismo, aquella actuación de sus afines ideológicamente, hubiera bastado para renunciar a sus ideas.

   Desapareció ETA, unos aficionados, (no se "inhmolaban") al lado de estos de la "yihad". Son criminales de nacimiento y además irracionalmente fanatizados por una absurda idea. Una lacra y un peligro para occidente. Con chinos, rusos, indios, etc., no se van a meter. Con éstos no queda otra más que la actuación policial y de las leyes. Acabar con ellos, desde el punto de vista militar (evitando el daño a inocentes) y esperar a ver si a los afines les entra el raciocinio. También que la progresía, tan crítica con los israelitas cuando se "pasan" con los palestinos, empieza a "piarla" contra estos "hermanos" de la alianza de civilizaciones.

   Volvamos a los delincuentes comunes. A esos que nacen malvados. Fijándonos sólo en España, en los últimos años tenemos un buen muestreo, de los más famosos, que crímenes raro es el día que no hay alguno: el espeluznante caso de las niñas de Alcaser; al Anglés no lo han echado mano, el Ricart ya está en libertad; el Bretón que se carga a sus dos niñicos; los de la otra niña adoptada en Galicia, ¿para qué acordarnos de Marta del Castillo con "El Cuco" y el "Carcaño" chuleándose de todo el mundo, y el dineral gastado (necesario), para buscar sus restos..?

   De la injusta severidad, de la brutalidad contra cualquier pequeño o grande delincuente en tiempos pasados, hemos pasado a otra, también injusta, laxitud contra el delito. Aunque pocos se atrevan a escribirlo, esto es un sentir generalizado entre la población: lo barato que resulta robar, matar.

   Presumir de buenismo  farda mucho. Es, o fue, una de las modas de la filosofía "progre". Hasta nuestra Constitución recogió , ¡y qué bien si fuera eficaz!, esa doctrina en su Art. 25.2: "las penas de prisión, etc., estarán orientadas a la reeducación y reinserción social".

    Reinserción de violadores que cuando salen de permiso penitenciario la vuelven a armar, a criminales que idem. Conozco ejemplos muy cercanos.

    De ello trata Adolfo Tobeña en "Neurología de la maldad", estudio científico a disposición del mundo de la justicia en el que, incluso alerta de la imposibilidad en la mayoría de los casos, del buen deseo constitucional, con individuos que carecen de sentimiento de culpa, que son insensibles, incluso gozan con el dolor ajeno.

     Desgraciadamente el freno para los malhechores no es otro que el temor a que les sean aplicadas unas leyes coercitivas justas, que se los aparte, incluso de por vida de la relación social. La relativa impunidad con que ahora actúan anima mucho.

    Que nadie piense, al atreverme a escribir de lo que se habla mucho, pero no sobre el papel o la pantalla, que me motiva el odio, sino mi afán de justicia, y, sobre todo, mi piedad por las víctimas. Les puedo asegurar soy persona compasiva pero mucho más con quien sufre que con hace sufrir.

    En el próximo capítulo, s.D.q., trataremos de la gente más corriente.

     

 



domingo, 19 de marzo de 2017

                      HOY VA DE BUENAS, MALAS Y REGULARES PERSONAS. (I)

            Bien pronto, desde niño, como a Paco, el monaguillo de Mosén Millán, en la novela de J. Sénder, empezó a preocuparme el comportamiento de las personas.  Por eso observaba, me fijaba en actuaciones.

            Poco a poco se fueron afianzando mis convicciones, para las que tampoco hace falta ser un lince: los seres humanos, en cuanto a sentimientos, somos mezcla de “ángel y demonio”, o mejor de bondad y maldad, distribuidas ambas de forma muy aleatoria, predominando en cada uno, en muy distintos porcentajes, una u otra cualidad. Por ej.:  desde los del 100 % de maldad a los de ídem de bondad. En el intermedio los hay de todas las gradaciones.

            Para configurar la personalidad de cada uno, a esa tendencia al bien o al mal, hay que añadir otras muchas cualidades, aptitudes: la inteligencia en todas sus variantes, capacidades, como las distintas clases de memoria, destrezas y condiciones  físicas (mayor o menor tamaño, robustez) o intelectuales, habilidades… La mezcla de todo configura la personalidad de cada cual.

            Bien pronto en la escuela, los maestros, vivimos las enormes diferencias intelectuales, la facilidad o dificultad en el aprendizaje entre unos y otros niños y niñas. A pesar de lo cual habíamos, ya en los tiempos de la progresía, de aguantar las “chapas” de los sicopedagogos para que todos los alumnos por igual,  “progresaran adecuadamente”. Se les olvidaba la evidencia del dicho clásico: “Cuando naturaleza no da, Salamanca no presta”. 

            De entre todos los grupos de alumnos que, en mayor o menor medida, pasaron por mis manos, yo sabía ya desde primer y segundo curso de Primaria, quiénes tenían capacidad para realizar estudios universitarios. Como mucho dos o tres en cada clase de veintipico alumnos. Conociéndolos de niños  qué me va a extrañar la garrulería demostrada por unos pocos  de mayores.

            Ahora ya, libre de la esclavitud de lo políticamente correcto,  aseguro que el “fracaso” en Educación Secundaria, aparte de haber disminuido la capacidad de esfuerzo, se debe  a que “Quod natura non dat, Salmántica non praestat…” capacidad intelectual para adquirir los contenidos impartidos en esa etapa y menos en el bachillerato.

            Pues bien: tanto a las cualidades físicas, volitivas, intelectuales como a la mayor inclinación al bien o al mal vienen en gran parte determinadas por las leyes de la herencia. Lo de ser más o menos malo, bueno, inteligente,  torpe; soberbio, humilde; agresivo, pacífico; compasivo, cruel;  vanidoso, sencillo; resumiendo: mejor o peor persona, está en su mayoría en los genes. Todo eso depende en gran medida de la complejísima lotería de la biología.

            Todas mis anteriores convicciones, tan evidentes para quien no quiera cerrar los ojos, como los de la filosofía “progre”, resulta que las ha demostrado científicamente el Catedrático de Psiquiatría de la Universidad Autónoma de Barcelona, Adolfo Tobeña, referidas a la maldad, y por ende, a la bondad en el libro que les recomiendo, “Neurología de la maldad”.

 Basándose en el  estudio del genoma humano asegura existen identificados  centenares de genes por su propensión a la maldad. “El malo, pues, nace malo”.

Por supuesto que desmonta el infumable mito “rousseauniano” del buen salvaje, y el de la banalidad del mal de Hanna Arendt.

Desde sus tangibles, que están ahí, conocimientos biológicos, basados en el estudio genético y de cómo acaba cristalizando la maquinaría hormonal  y cerebral (el 30 % que le concede a los factores externos), afirma que los hay que “vienen de fábrica” con propensiones muy dañinas; que la gente buena, buena es como el 20% y los malvados no llegan al cinco por ciento; los que ya nacen criminales andan, en según qué etnias, por el uno o dos por ciento. Éstos son los poseedores de un gen ya identificado, al que han llamado el gen MAO-A.

También ha sido identificado otro gen, el “Finlandés”, de propensión a la bondad, que, junto al anterior, influyen, positivamente en éste, y negativamente en el MAO-A, regulando la serotonina cerebral.

De lo escrito no quiero sacar conclusiones pesimistas, estoy convencido es mayor el bien que el mal ( lo dice Tobeña), sino realistas.

Si Dios quiere, reflexionaremos en el próximo artículo, bajando ya más a pie de tierra, para  buscar soluciones para seguir con mi sermoneo laico, o no tanto, pues mamo de las Bienaventuranzas.



           
           



martes, 14 de marzo de 2017

PRIMER ARTÍCULO PUBLICADO EN "LA MAR DE CAMPOS"

                                                      PRESENTACIÓN.

    Nací en la “Tierra de Campos”, / entre Zamora y Palencia, / que llaman “Tierra de Campos”/ lo que son campos de tierra; “an'cá” de mi abuela, “la señá” Ana “la Maragata”, casona posada en la carretera de Madrid, en cuyo corral bien podría haber sido armado caballero Alonso Quijano; a seis leguas de Benavente y tres media de Villardefrades, cuando todavía sobre esa ruta cantaban los bujes de los carros, y los arrieros.

   Ya no conocí a los carromateros del pescado de Galicia a Madrid, pero todavía llegué a tiempo de convivir con los cisqueros de Urueña y San Cebrían (Matías Revuelta y Manolo), los manteros y chocolateros de Vezdemarbán; los marraneros de Palazuelo al regreso de Zamora (la ida de vacío, si la mula era andadora, la hacían de una tirada) paraban a pasar la noche, soltaban a dar agua a los negros gurriatos escallones, unos granicos de cebada y a hozar el muladar de mi abuela; y conviví con los afiladores de Maceda, José y el “Zazo” con los que más. En la primavera alta de cara a la siega, se tiraban dos semanas afilando cuchillas; recuerdo remotamente a los labradores de Torrelobatón, (Cisneros, Puerta) llegaban, pasada la sementera, los miércoles por la tarde y salían la madrugada del jueves, a vender sus bueyes en Benavente; después de “las Candelas” volvían a comprarlos para reblar, binar, terciar las barbecheras.

    Éramos aquellos, niños de poca y mala escuela, menos libros, muchos juegos, comida justa, tirando a escasa, de ahí las “brúas” en guisantales, garbanzales, majuelos…, a pesar de los guardas de la banderola y los vergajos de la “benemérita”; pantalón corto de pana, jersey de lana autóctona, cazadoras de borra y sabañones en las orejas.

   Servidor no tuvo la suerte, o la desgracia de Daniel “el Mochuelo”: para estudiar no pude salir del pueblo. Y fui niño respigador, vendimiador, aguardientero, agostero trillique, hasta que aprendí a escribir a máquina y me coloqué de mecanógrafo y recadero de abogado. A cambio me pagaba las clases particulares, los libros, la matrícula y me examinaba por libre en el Zorrilla de Valladolid.

   De aquellos viajes en el coche de línea, son mis primeros recuerdos de los campos y los pueblos de tierra, en tapial o adobe, aunque en las casonas solariegas, no así en las casuchas de los jornaleros, la protegieran con el barro cocido, en ladrillos, que les enseñaron los mudéjares, tan parecidos al mío, 
cuya importancia asociaba al número y la altura de las torres, éstas ya de sillares de arenisca o ladrillo macizo.

  Las  iba divisando a lo lejos, por encima del caserío apiñado en su torno, de los panes, rastrojeras y barbechos: Villamayor, Santa Eufemia, Villafrechós, Morales de Campos, Tordehumos, Villabrágima, el más importante del recorrido, mancha de verdor en medio de la estepa, hasta que cruzado, libre la carretera de cercados y árboles, aparecían las majestuosas iglesias, en piedra blanca y dura del páramo, catedrales terracampinas de Santa María, Santa Cruz y Santiago. ¡Amigo!: es que ese pueblo es Rioseco.. Además tiene un canal, dos fundiciones, un fabricón de harinas, tren y una calle con soportales, me dijeron.

   Para acabar con mi presentación, que el folio no da más de sí, les resumo plagiando burdamente a Juan Ramón: soles, cierzos, escarchas; cabones, espigas, alfalfas; eras, bodegas, besanas, arados, palomares; niños campesinos a quienes educar en escuelas de pueblo; historias, costumbres, vivencias contadas en papel y pantalla; inquietud y compromiso social para erradicar la vieja lacra del caciquismo que ya le dolía Macías Pîcavea; no Platero, sino todo eso, y yo. O mejor: servidor de ustedes.

A. Modroño Alonso.



martes, 7 de marzo de 2017

REFLEXIONES SOCIALES (II)





La irrupción en "Feisbuk" (deseo castellanizar el anglicismo) de las calumnias y descalificaciones a mi persona, interrumpieron las reflexiones sociales. Esas actuaciones que he criticado, de las que he informado, me reafirman aún más en la necesidad de que se imponga la honradez. Las sociedades serán cuanto más perfectas a medida que los sean los individuos que las forman.

A Macias Picavea, cuando, al conocer la idiosincrasia de los pueblos de Castilla, el individualismo, hipocresía, mediocridad, zorrería de sus gentes, le invadió el pesimismo de que la mejora social partiera de abajo a arriba, le invadió la tentación de que surgieran líderes autoritarios, rectos, bondadosos, paternales que pusieran remedio a ese estado de cosas.

Recuerdo que en los años de la dictadura, allá por los sesenta, cuando el desarrollo y el pleno empleo, cuando se transformó el país, cuando la gente iba olvidando las heridas de la guerra, cuando se creó la seguridad social, los hospitales y las pensiones, ante la conformidad de la mayoría de la población, era muy común justificar la dictadura porque los españoles, por nuestra forma de ser, no éramos capaces de vivir en democracia.

Un día en el bar del cine, en la transición, cuando la tele ya empezaba a hablar de la formación de partidos políticos, le oí a un obrero que trabajaba él y su mujer, y, como la mayoría, había mejorado su calidad de vida, la siguiente frase: -"Sí: los partidos políticos, pa echarnos reñir a los unos contra los otros como cuando la guerra" . Luego resultó ser muy socialista.

Si estaría arraigada esa opinión que dio lugar a que el grupo musical "Jarcha", en el 76, saliera con esa canción que fue el himno de la transición: "Libertad, libertad, sin ira, liberta. Guardia tu miedo y tu ira porque hay libertad, y si no la hay sin duda la habrá".

Leyendo los editoriales del grupo "Tácito" en el "YA", me convencí que era imprescindible, que no quedaba otra opción, a la muerte de Franco, que la transición democrática; de que ni continuismo, ni ruptura.

No obstante me preocupaban los retos que la democracia tenía por delante: los separatismos catalán, entonces, con Tarradellas, adormecido, y el vasco, en plena efervescencia; el terror de ETA; el deseo de revanchismo que observaba asomar en ciertos izquierdistas rabiosos e históricos (al poco Felipe los domesticó a todos); los inmovilistas como Girón y Blas Piñar, la masacre del despacho de Abogados laboralistas. Me preocupaba la crisis económica del 73 propiciada por la brutal subida de los precios del petróleo, a causa de la guerra de Ihon Kipur... Pero entonces, dada mi juventud e idealismo no pensaba en el cáncer que podía corroer la democracia: las tendencias negativas, los vicios, las imperfecciones, la maldad de muchos, por desgracia, seres humanos, que traería consigo la profesionalización de la política, el ansia de medro en ello, el enriquecimiento ilícito, la corrupción. También el fanatismo que lleva al voto a piñón fijo. Aquella frase de cuando la enorme corrupción de la época de Felipe González. -"Como son los míos, si roban me da igual" . Después, todavía bastantes de derechas con el PP, si no lo dicen, lo piensan y votan. Cierto que lo de "todos son iguales" , más el miedo a Podemos, justifica esa actitud.

Esta necesidad que tiene la democracia de que todos seamos más virtuosos, se palpa en la vida, en el gobierno de los pueblos. Cuando no existía la pelea por el mando del que se empezó a obtener beneficio, los bajos instintos estaban adormecidos. La convivencia en el pueblo era mucho más pacífica. Incluso, como no cobraban, nadie se mataba por ser alcalde, sobre todo desde que yo recuerde. No niego que entre el grupo de los que podían mandar existieron piques, rivalidades y enemistades.

Me remonto a los tiempos de Emiliano Suena, al que me unió una buena amistad. El pueblo era una balsa de aceite. A partir de él, cada vez resultaba más difícil encontrar en Zamora, quién quisiera ser alcalde. Lo fueron don Millán, pobre, y Aquilino, porque eran funcionarios, y medio a la fuerza. Cualquiera de los tres citados fue mucho más competente y, sobre todo honrado, que la y él “democráticos”. Lo pongo entre comillas porque la forma de obtener votos, a partir de la tercera legislatura, de Carmen Allende era más que dudosa. Y el de ahora, bien poco respaldo democrático tiene en el pueblo, la tercera parte del censo. ¿Quieres a Ruperta por esposa? Al no haber otra cosa.

La democracia y el respeto a los derechos humanos son la mejor forma de organizarse las sociedades, si bien para que estas no se vayan al garete en perjuicio de todos (vean los estragos que ha causado la corrupción política) es imprescindible que todos seamos más virtuosos, (honradez, sinceridad, incluso compromiso, mojarse cada uno lo que pueda, aunque sé que eso, en el pueblo, es pedirle peras al olmo)

Pertenezco a la generación de los que entonces jóvenes, ( Adolfo Suárez, Marcelino Oreja, Landelino Lavilla, Martín Villa, Felipe González, Alfonso Guerra,,,) junto a otros mayores, (el principal, Torcuato Fernández Miranda, Gutiérrez Mellado, Fraga, sí también Fraga, Tarancón, Santiago Carrillo…) en las postrimerías del franquismo trajeron la democracia. La saludé con alegría. Estuve en todas las mesas electorales de la época. Milité en UCD, después en AP (del PP me expulsaron, un honor, cuando empecé a luchar contra su corrupción en este pueblo). Dentro de mis posibilidades siempre he tenido inquietud por lo político, lo económico, lo social. Salí elegido concejal en las primeras elecciones municipales. Renuncié al cargo antes de la investidura, al ver los manejos antidemocráticos para hacerse con la alcaldía. (UCD,4; PSOE, 3; los de Nano, 2; nosotros, liberales, 2, aquello se prestaba a todo juego de combinaciones). En las segundas, en la lista de Carmen, entonces PDL, 83-87, obtuvimos mayoría absoluta, entonces limpia, sin la residencia (PDL,5; PSOE, 3, AP,1).

Por entonces yo no sabía que se cobraba por la alcaldía, y por las concejalías. Se trató en el primer pleno. Un 4% del presupuesto eran las retribuciones a la Corporación; dos por ciento para la alcaldesa y el otro dos por ciento a repartir entre los ocho concejales.

A servidor, por entonces convencido, de que la actividad política debería ser una labor altruista, sin remuneración, si acaso los gastos derivados del cargo, viajes, por ej., no le entraba en la cabeza que se pudiera cobrar por ello. Chocaba con mis principios. Renuncié, en principio, al “sueldo”, algo más de cincuenta mil pesetas al año, de aquel entonces.

Mi actuación de última trinchera, cuando Carmen, aniquilados sus adversarios políticos (Luciano López, Pilar Casado, Nicolas Pérez, Felipe Vega) había implantado su bota sucia sobre el pueblo, es de todos conocida. Mi error fue la ingenuidad, el desconocimiento, la generosidad de hacer todo ese trabajo para otros, de aquel domingo de Ramos en “La Jabonera”, cuando creía que todos éramos una piña, decir: “-Pues que encabece Félix, por jubilado, tiene más tiempo que Cesáre,o hasta arriba con los camiones”.

Cuando en 2.007 se subió al carro, que ya se veía ganador, gracias a mi labor, sobre todo la de haber evitado el fraude en el voto por correo (a las monjas se les quitaron las ganas de llevar a 47 ancianos a correos a garabatear la firma o poner el dedo; además mi gestión con el Jefe Provincial de Correos también decidió), se subió, digo, el segundo de a bordo, otro buscador de beneficios personales en la político, “la jodimos tía Dolores”.

Recuerdo que en el moderado júbilo de la noche electoral, ese segundo de la lista del PP (refugio de corruptos), entre guasón, suficiente y como en broma, me dice:

-¡Cómo nos hagas a nosotros tanta oposición como le hiciste a Carmen, estamos apañaos!
-
Espero no sea necesario, le respondí entre risas.

Desgraciadamente fue necesario. Muy a mi pesar, hube de remangarme. No soportaban mis ligeras críticas en “villalpandinos” por lo de los caballos del silo (¡por cierto!: según me informan uno de esos caballistas, sigue tomando agua de la red pública, por donde el ALSA, para llenar cubas de miles de litros con fines particulares) ni las de la obra en la Puerta de Villa, y se vinieron a por mí. Y en mi defensa destape todo lo que vengo contando, y lo que falta.

(Perdonen un inciso en cuanto a la “Puerta de Villa”: ni la antifuncional pasarela, ni los remedos de fosos, llenos de maleza, han servido para evitar las humedades. Observen cómo está el cubo de la izquierda según se baja. Un drenaje como el de los campos de fútbol y un empedrado con piedras del raso por encima hubiera sido más barato, eficiente y funcional).

Entre tanto sepan cuál es la actitud actual:

a).- No contestan al escrito en que pido el dictamen del Arquitecto de la Diputación sobre “Los Cercados y Corraletas”.
b).- No contestan a mi petición de acceso al libro de Registros de Entrada
c).- Lo último, muy reciente, de la semana pasada, no contestan a mi petición escrita de poder acceder al expediente de la obra de la nave de mi hijo, mientras que el denunciante de la también presunta denuncia falsa, ha escudriñado todos los expedientes de nuestras obras, todas ellas con proyectos y licencias legales, con lo cual están incurriendo en ilegal indefensión.

Bien: dada mi trayectoria anterior y desde hace unos años en esta bitácora, está clara mi apuesta regeneracionista intentando influir en las conciencias.

No pido que nadie se ponga en fila detrás de mi bandera. Ya sé que en la falta de actitud de compromiso las gentes de este pueblo huyen de “significarse”. Sólo les pido que, en el interior de sus conciencias, conociendo a las personas “por sus hechos”, conociendo todo lo que voy exponiendo y nadie rebate, juzguen sobre la personalidad del luchador y la de sus enemigos. Y, sobre todo, huyan de la hipocresía de dar el “para bien” a “hunos” y otro.

No, por favor, no acudan a la excusa tópica, para tranquilizar sus conciencias, de “el de siempre”. De todos mis referentes históricos, desde el de Nazaret hasta Nelson Mandela, pueden decir lo mismo.

Me siento en el deber, lleno de razón, de seguir con esto hasta el final. Atentos al capítulo (III) de la serie anterior.


NOTAS NECROLÓGICAS: En las últimas dos semanas han fallecido en el pueblo: Micaela Alonso Sinde, de la familia de “Los Guadillos”, tenía 95 años; Dionisia Redondo Mansilla, fue la mujer de Amalio Argüello, madre de Milagros y Amalín, iba a cumplir 101 años; anteayer Angelita Fernández San Pedro, hija única de Paulino Ranillo, que fue hombre muy competente, trabajador y buen amigo. Reciban sus familiares mis condolencias.

domingo, 5 de marzo de 2017

SOBRE ANDRÉS VÁZQUEZ.


     Desde el año 2.012 en que estallaron las divergencias entre la anterior Corporación y Andrés Vázquez, me he mantenido al margen de todo ese conflicto.

    Desde la autoridad que me da haber sido la persona de Villalpando que más, con mucha diferencia, ha hecho por el maestro, ya no me puedo callar.

    La polémica surgió de nuevo cuando el  Grupo Municipal Socialista de la actual Corporación presentó la propuesta de dedicarle una calle al diestro, que rechazó la mayoría del PP.

    Entonces salió el alcalde con unas declaraciones en La Opinión en las que afirmaba que el homenaje que el ayuntamiento había programado para el día de Santiago de 2012, al que iban a asistir antiguas y más recientes figuras del toreo, se había suspendido porque "Andrés los había llamado, diciéndoles que no vinieran porque ello era una bobada, que lo que se iba a gastar el ayuntamiento en la estancia de las figuras invitadas, que lo aportaran para el festival a celebrar en Zamora, unos pocos días después, en que mató u novillo a los 80 años."

    Me afirma una fuente muy directa, que no existieron las tales llamadas, que lo de suspender el festival fue decisión del Ayuntamiento, por lo que Andrés emprendió un procedimiento judicial por calumnias.

    Lo cierto es, que después de una larga instrucción judicial y de un acto de conciliación en que
no hubo avenencia, el próximo día 23 se celebrará el juicio oral en el Juzgado de Instrucción de Villalpando. Siguiendo mi norma de no afirmar o negar, de lo que no tenga pruebas, al no tener, en este caso, suficientes elementos de juicio no entro en más detalles.

    Si ahora me he decidido a escribir es, a propósito de la polémica suscitadas por el artículo de Paco Cañamero en su Glorieta Digital y los comentarios subsiguientes, en que unos defienden al torero y otros lo denigran.

   Desde mi condición de biógrafo, de conocer a "El Nono" de toda la vida, quiero terciar en este quite contra el toro de los intereses creados, señalando hitos de la historia del torero y de su personalidad humana, que es conveniente recordar. Me acojo al dicho evangélico que siempre tengo en cuenta: "Por sus hechos los conoceréis".

                                        HECHOS EN LA VIDA DE ANDRÉS VÁZQUEZ.

Primero: Se empeñó en ser torero y lo fue, grande, contra viento y marea. Se pasaron once años  (1951-1962)  de penalidades, de recorrer plazas de carros, vacas resabiadas, formar parte de la plaga de maletillas por los campos de Salamanca, pasar hambre, sed, frio, desde que toreó su primera novillada en "Vista Alegre", hasta que tomó la alternativa en las Ventas.

Segundo: En los años sesenta fue el cuarto o quinto del escalafón, con cuatro fenómenos como lo fueron "El Cordobés", "El Viti", Paco Camino, Diego Puerta; andaban todavía por ahí Antonio Bienvenida, Antonio Ordoñez,  etc.

Tercero: Se codeó con todos los famosos de la época (toros, fútbol, artistas e incluso intelectuales de fama mundial.

Cuarto: Paseó el nombre de este pueblo por todo el mundo. Todos los villalpandinos de aquella época estamos hartos de oír: ¡Ah sí!, el pueblo del torero. Creo era más conocido como el de Villalpando que como Andrés Vázquez. Bien es cierto que en aquellos años en el pueblo vivimos una emociòn colectiva con "El Nono".

Quinto: En los años de gloria fue generoso, rumboso con los dineros. No voy a entrar en detalle en la ayuda a sus hermanos porque ahí está. La conocemos todos. Bien que lo reconocía su hermano mayor, quien lo acogió y protegió cuando, sin un duro, volvió al pueblo

Sexto: A partir de la pag. 43 de sus memorias, vean las fotos con las Hermanitas de los Pobres de Zamora. El beneficio de una corrida en que mató seis toros, fue para esa institución, UN MILLÓN SETECIENTAS MIL PESETAS del año 1974. Esas obras son amores.  

      Esos son los datos por los que Andrés es conocido, valorado, aparte de los fallos que en la convivencia en el pueblo haya cometido.

      Siempre, al enjuiciar los hechos es necesario tener en cuenta las circunstancias de las personas. ¡Pues miren!, lo dijo Ortega y Gasset, "Yo soy yo, y mis circunstancias" . Al Andrés que con un coche viejo y siete galgos regresa al pueblo, tan manejable, tan necesitado de afecto, le he perdonado las dos faenas gordas, gordas, que me hizo. Algún día contaré el boicot a la publicación de sus memorias y cómo tuvimos Sara y yo que afrontar ese riesgo, y como Carmen, pasado un tiempo, se lo volvió a meter en el bote.

     La de ir de testigo falso en mi contra, aunque de nada sirviera, a cambio de tanto como por él había hecho, me dolió en el alma. Me ausenté de la sala. No podía soportar aquella traición. Tardé en echarlo mano. Nos evitábamos. Cuando le pesqué y se lo reproché solo le falto llorar.

    Ahora lo cuento porque no va a llegar, ni quiero, a sus oídos. Le he perdonado porque los culpables fueron lo que intentaron utilizarlo, tan desvalido.

     Pero de todos los modos esa cosilla con uno de su pueblo, no va a aparecer en su leyenda. Andrés ya lo es viva. De su película "Sobrenatural" se empiezan a leer, a ver reportajes en todos los medios. El último en la revista "La Mar de Campos".

    Es un honor para mí leer, por ej. en  "El País", anécdotas narradas por mi pluma. Se vuelven a vender ejemplares de ese libro, del que le regalé mil doscientos.

    Creo, espero, deseo que la vida en su última etapa le haga justicia, incluida la de los tribunales, a Andrés Mazariegos Vázquez, "El Nono",                                                                                                                                                                                                                                                                                    
 

miércoles, 1 de marzo de 2017

AVISO


     Si a alguno de mis lectores le llega una sanción porque su nave agrícola carezca de Licencia Medio Ambiental, o del papel de  "Comunicación de inicio de la actividad", les recomiendo, si está construida después del 2.003,  se lean  la Ley de Prevención Ambiental de Castilla y León, 11/2003 de 8 de abril. Verán En el Art. 24.1, y el 25,, cuáles son las actividades e instalaciones sometidas a la obligación de poseer "Licencia Ambiental".  Les aseguro que ahí NO están incluidas las NAVES AGRÍCOLAS, puesto que NO CONTAMINAN EL MEDIO AMBIENTE, ni a nadie molestan.

     Tampoco se preocupen si les denuncian por no haber presentado el papel de "Comunicación de Inicio".  En los Arts. 33 y 34 de la Ley 11/2003, y el 42 de la 1/2015, queda  muy claro que ese papel no  es obligatorio para las naves agrícolas. Si no están afectadas por esa Ley, al igual que no es obligatoria la Licencia Ambiental, tampoco lo es la Comunicación de Inicio de una instalación sometida a la tal.

    Y, ya de paso, les advierto a los responsables municipales de emitir y firmar informes, cuando, por consecuencia de denuncia, se lo piden del Servicio Territorial de Medio Ambiente, u otro organismo,  que se lean la ley, que se enteren de que para una nave construida con Licencia de Obra de ese Ayuntamiento de fecha 20 de abril de 2004, y con toda la legalidad del mundo  (pues no hubo qué vencer obstáculos), cumpliendo todas las leyes, entre ellas la citada de Prevención Ambiental,  no era preceptiva , ni lo es en creo en la actualidad, la dicha Licencia Medioambiental.

    Por tanto la respuesta del ayuntamiento en lugar de decir que "no cuenta con ningún tipo de licencia medioambiental", debió haber sido que dicha nave fue construida totalmente de acuerdo con la legalidad.

    Y, aún suponiendo, que en el 2.004 faltara algún papel a buena hora  Carmen, quien al lado de éstos, el listo y el tonto, era Sor Teresa de Calcuta; "otro vendrá...", nos lo hubiera consentido, lean el art. 83 de la tan referida  Ley 1/2015.

    Bien empollada la Ley me he enterado que la "Actividad Ganadera Doméstica para consumo propio", dependiendo de qué número de cabezas y especie, también requiere Licencia Ambiental o Medio, y el papel de Inicio de la Actividad.

    Estoy un poco acojonadillo: resulta que en el corral tenemos siete gallinas ponedoras de huevos sin galladura, las pobres; conejos padre y madre, él muy "cogedor", como el de mi amigo Domingo, que le llevaban las conejas de la vecindad a que "las cogiera", y ella, que pare como las idem, y cumplen el mandato bíblico de "creced y multiplicaos", más dos camadas de ocho en total; un "quico" enchulao, y su quica a quien, por celos, le pican las otras gallinas; encima se ha quedado clueca, y como se ha enterado de lo de la gestación subrrogada, se ha puesto a incubar los huevos de las otras gallinas; Fores, más algunos gatos que nos podrían adjudicar, y resulta que leyendo el Anexo III del Art. 42, si entre todos suman lo que una vaca, en cuanto a ventosidades contaminantes, ya hay que sacar papeles...

     Si por si acaso lo lee algún enteradillo me gustaría saber si estoy o no legal. Podría acercarse por Los Corralones para ver si también el gallinero, conejera, cama de Fores, agua, limpieza, comida, y demás circunstancias de habitabilidad, cumple con los "estándares" de la Ley de Protección Animal.

   Si es algún burócrata "mandao" del Ayuntamiento, mejor no, pues o saben poco de leyes, o lo que es peor, las interpretan a su modo, siempre intentando  "hacerme un favor". Todavía, con perdón a las feministas, si fuera mujer...