miércoles, 25 de noviembre de 2009

ANUNCIOS BREVES.

Masajista profesional, titulada, (no confundan con las páginas de contactos), fenomenal da, a domicilio, masaje terapéutico antidolor, relajante.

Doy fe de su eficacia, el domingo me dejó como nueva la espalda, castigada por el tractor. Al preguntarle cuánto, me dijo 10 euros. Le di más. Se llama Yeta. Como no encuentro el móvil, pueden llamarla al teléfono de Pilar Casado. 980 660 450.

Leonor Salazar. Boliviana, 46 años. Se ofrece como trabajadora del hogar interna, cuidado de mayores, enfermos.- Tef. 665 786 339. Me ha parecido una señora maja.

Sadia: Se ofrece para lo mismo. Cuidó con cariño y sin que le faltara de nada, a Antonio Ortega, día noche, durante meses, hasta el final. Mis referencias, directas, son inmejorables. Inconveniente: no se desprende de una perrita, quien, junto a un hermano son los únicos cariños que tiene en esta vida. El hermano vive por su cuenta en Lora del Río.
Ambas tienen papeles. Tel. de Sadia : 666 612 231.

Quien necesita mayor información puede contactar con servidor.

domingo, 22 de noviembre de 2009

ASPROSUB Y JOSÉ VELEDO.

Asprosub, en Benavente, realiza una encomiable obra social. Allí encuentran cobijo, protección, asilo, ocupación los que reúnen unas mínimas cualidades, muchachos, hombres, mujeres disminuidos síquicos de todos los grados y dolencias. También los hay con minusvalías físicas, de nacimiento o por enfermedad.

Por detrás de los edificios albergue, en dos hectáreas calculo, se extienden los viveros invernadero, al aire libre, nave almacén, oficinas, taller ocupacional, etc. etc. Miles y miles de plantas hornamentales, arbóreas. Todo lo que ha de ver con la jardinería: semillas, herramientas, decoración,.... .

Voy por allí con cierta frecuencia. El Director es Jesús Toranzo Cepeda. Me decía hace unos días que es la mayor empresa de Benavente, con ciento y pico trabajadores (la mayoría con alguna minusvalía, que les permite actividad más o menos normal ) en nómina. Realizan mantenimiento en jardines de muchos pueblos de la provincia. Aquí, por ej.,.

Por allí, sueltos, andan los que tienen cierta capacidad de movimiento, y de comunicación. Algunos, incluso, hasta que hablas con ellos, te parecen normales. Unos cuantos se me han hecho amigos. Me saludan así que me ven: Emilio, "Gallofa", Petete.

A los más disminuidos los tienen ocupados, dentro de las aulas, con alguna actividad manual, o de entretenimiento. A los casi vegetales, los alimentan, limpian.

El viernes hablé con Avelino, un Maestro responsable de su cuidado. Le pregunté por Jaime Veledo Morales.

-¡Fíjate!. Creo que se da cuenta. Echa en falta la llegada, todos los sábados de su padre. Si había estado aquí, a traerlo, ese lunes por la mañana. Era el padre más implicado en el cuidado del hijo. Algunos nos los dejan aquí y vienen de tarde en tarde. José no faltaba a buscarlo ni una semana. Al chico le daba mucha alegría verlo. Pasaba aqui horas, jugando con él, o participando en actividades. Siempre traía caramelos para los otros chicos,.... . Hemos sentido mucho su muerte, tan inesperada.

José, a quien le arrebataron el padre cuando tenía cuatro años, volcaba su cariño paternal sobre ese hijo pequeño desvalido.

sábado, 21 de noviembre de 2009

LA PROTESTA CAMPESINA.

En general hay motivo para la queja. Y no sólo por la situación actual, sino por lo que pueda ocurrir a partir del 2013, en que se terminan los presupuestos para la actual política de ayudas, agraria común, la PAC.

Lo más injusto e indignante es la enorme diferencia de precio entre lo que percibe el agricultor y ganadero, y lo que paga el consumidor, diez o quince veces más en algunos casos.

Dicho lo cual, maticemos. Es un mundo heterogéneo, con una enorme diferencia de unos sectores a otros, y de unas explotaciones a otras.
Fijémonos en el sector de los grandes cultivos de secano: cereales, legumbres, forrajes, oleaginosas. Los que tienen muchas hectáreas reciben bastante dinero de subvenciones. Entre las Ayudas de la PAC, Zona desfavorecida, Ayudas Medio Ambientales (lo que se llamaba de las avutardas), Forestación de Tierras Agrarias, existen unas cuantas familias en la comarca de sesenta y setenta mil euros anuales, por unidad familiar. Aunque ya nada saquen de las cosechas (que aplicando nuevas técnicas, y viejos cultivos, como el de la alfalfa, en años normales, algo más se saca), no es para quejarse. Esos altos ingresos saltan a la vista: tractorazos nuevos, las mejores y más modernas máquinas, flota de coches de todas las gamas,….. .
En el extremo opuesto están las explotaciones, sobre todo ganaderas, que lo están pasando muy mal. Muchos cerrando y al borde la ruina, sobre todo en el porcino, y más en el ibérico de cebo, donde, dados los precios actuales, por más modernizadas y bien gestionadas que estén son inevitables las perdidas. Y el porcino no tiene subvenciones.
En el ovino ha mejorado la situación en los últimos meses. Los de esta comarca han aguantado dos años muy malos, sin apenas disminución de la cabaña, lo que sí ha ocurrido en otras zonas. Aquí la diferencia de rentabilidad de unas cabañas a otras es grande, según la genética y el manejo. Están emergiendo explotaciones pioneras, tan bien gestionadas (control lechero, sanitario, selección de la cabaña según ello, raciones adaptadas a la producción, control de las cubriciones; todo informatizado, o en cuadernos ) que compiten con las mejores del mundo. También subsiste el pastor tradicional, el del pastoreo, quien, libre de amortizaciones, sin deudas, se sigue defendiendo, a base de trabajo y esclavitud. Al que le ha pillado debiendo o con malas ovejas lo está pasando muy mal.
Vacas de leche, en Villalpando no ha quedado ni una. Sí en cambio en la Comarca, con tres explotaciones mastodónticas: una en Revellinos, otra en Villanueva del Campo, la tercera en Bolaños. Quedan explotaciones pequeñas y medianas en Cerecinos y Villamayor. Vivieron, como hasta hace año y medio, época de buenos precios y ganancias. Ahora están produciendo sin apenas rentabilidad. Le pagan el litro de leche a 41 pts..
Desaparecieron las de leche, pero surgieron las de carne: tres grandes explotaciones hay en el pueblo. Como están bien dimensionadas, capitalizadas, y reciben ayudas, no tienen problemas.
Otra cosa son los cebaderos de chotos: con los precios actuales, y llevan así mucho tiempo, la rentabilidad es muy escasa. Si bien, dependiendo del número de cabezas, la disponibilidad de dinero para comprar grandes cantidades de cebada barata, y la buena gestión en compras de terneros ( los traen de Europa del este, quienes ceban mucho), y ventas de canales, unos se defienden mucho mejor que otros. Por sus dimensiones, 900 cabezas, instalaciones y gestión sobresale una explotación de Tapioles. Familia que marcha de maravilla.
Los de los pollos están viviendo buenos tiempos. Es un buen complemento a la agricultura, o incluso para vivir de ello en exclusiva. Nave de mil metros, de 10 a 12.000 polos, millón de pelas cada dos meses, según me cuentan, cuando salen bien las crianzas.
El sector agrícola peor tratado en la actualidad es el hortofrutícola. Son superficies de tierra menores, pero con unos costes enormes de producción: agua, energía, fertilizantes, trabajo, y con escasas y nulas ayudas de la PAC. A su producción, como es perecedera, han de darle salida a como les paguen. Las diferencias de precio entre el campo y la tienda, escandalosas.
No sólo es el momento actual el que preocupa, sino el futuro próximo. Y no es cuestión de pedirle dinero al gobierno, (¡bueno está el patio!), sino de medidas necesarias.
Pongo un ejemplo propio: las tarifas eléctricas de riego. Hemos pasado de pagar 24 euros cada dos meses de mínimo, a 60 todos los meses. Controlar los márgenes de ganancia de las grandes superficies. Controlar las importaciones (que no se pueden impedir en un mercado libre) para que reúnan las exigencias de calidad que a los productos nacionales se aplican. Que continúen las ayudas de la PAC, reservándolas para los que realicen actividad agro-ganadera. Que aumente el monto para políticas medioambientales, la forestación de tierras agrarias, (por ejemplo), primando a los agricultores que las realicen por sí mismos.
Resumiendo: Es necesaria otra política. Hay motivo para la queja, pero, siendo sincero, mucho más en unos que en otros.

domingo, 8 de noviembre de 2009

EL PUEBLO DE LOS PIÑONES.

Pues resulta que una amiga villalpandina, María Jesús de la Puente Boyano, se fue a vivir a ese pueblo hace veinte años. A una sucursal bancaria del mismo habían destinado a su hermano Ignacio. Los padres, Ignacio, un "Quiterio" que trabajó en el Juzgado, y Teresa, hija de "Tinajo", los dejaron huérfanos muy jóvenes.

María Jesús cometió el error de esperar nueve años a casarse con un "pedrejero" al que conoció nada más llegar, porque José Antonio es un tío majo, majo: discreto, educado, buen profesional de la carpintería. Poseían unos talleres que me ha impresionado verlos. ¡Bueno!, gracias a esa tardanza ahora tienen un crío moreno precioso de 9 años.

Ayer nos invitaron a pasar el día con ellos, visitando algo de lo mucho que se puede ver en tan industrioso pueblo. Nos habían programado las visitas.

La primera, ¡cómo no! a una industria piñonera: Teresa Mate, "Piñones de la Tierra". Alfredo, el esposo, nos atendió con excesiva amabilidad. Servidor, en su insaciable curiosidad, no paraba de preguntar. Quiso, en las instalaciones centrales, comenzar la explicación desde que el piñón, con cáscara, entra en ellas, pero yo quería conocer el proceso desde que la piña llega del árbol.

Para ello nos desplazamos hasta la "era", mucho más grande que las de aquí de trillar, completamente lisa, compactada, y sin un hierbuco, fuera del pueblo. En un extremo una nave abierta de 1.600 metros cuadrados que, en breve, comenzará a recibir piñas, hasta llenarse.

Empiezan ahora a recogerlas, aún verdes y el piñón lechoso, pues la campaña dura varios meses. Si comenzarán en el momento óptimo de la de maduración, mes de febrero, marzo, no les daría tiempo: con los calores de mayo empiezan a abrirse. además el piñón va madurando en la piña cortada.

En el verano las extienden en la era, se abren, les dan vuelta, y las echan en una máquina que las tritura y separa piñones del resto de la piñas machacadas.
Éstos los van almacenando en una nave grande, robusta, dentro del pueblo: remolques y remolques. Varios millones de kilos.

Durante todo el año, en otro edificio muy próximo, les quitan la cáscara, la camisa, camiseta, calibran, seleccionan, lavan, secan, matan el germen con el vacio, garrapiñan, fríen una porción, envasan, en muy distintos tamaños, venden, exportan. Se pueden imaginar qué complejididad de máquinas, e instalaciones, hacen falta para ello. Pero ver en grandes y limpios contenedores esos miles de kilos de piñones tan limpitos, paga todo el esfuerzo.

Luego visistamos otra industría similar, de una Cooperativa de 18 socios piñoneros. Unos de éstos comenzarán el día 11 a recolectar las piñas de "El Raso". Sentarán su base en Belver. Como no saquen 200.000 kilos, palmarán dinero.

Las cáscaras de piñas y piñones son un excelente combustible. Se emplean para calefacción de naves avícolas, e incluso para calefacción doméstica. Todo ello va a parar a otra impresionante industria, "BIOMASAS HERRERO".

Había conocido al dueño en Expobioenergía, pero no me había imaginado lo que allí había: montañas de cáscaras, de leña, de residuos de carpinterías. Todo lo que es ramaje de pino, limpio y de cierto calibre, embalajes sin puntas, virutas, recortes de carpintería, lo convierten en serrín y transforman en pellets, del tamaño de los gránulos de pienso compuesto. Dos kilos de ellos poseen el mismo poder calorífico que un litro de gasóleo. Como existen calderas muy apropiadas, pienso ese combustible acabará por sustituir al gasóleo en las calderas de calefacción.

En Pedrajas de San Esteban se ve la riqueza por todos los sitios: todo nuevo, limpio; ni un adobe ni un tapial, (la antítesis de mis queridos pueblos terracampinos), tampoco edificios de pisos: mucha piedra, chalets, jardines, instalaciones educativas, deportivas, culturales (la Casa de la Cultura, con su enorme biblioteca, su auditorio, su entrada diáfana y ajardinada, merecería capítulo aparte).

Impresionado he vuelto de mi visita, y con una enorme deuda de gratitud a nuestros anfitriones. Por la tarde nos llevaron a la ermita de Sacedón, junto al rio Eresma, todo entre pinares. Allí, escalando enorme pino, la estatua del piñonero con su pica. Después a los pinares de Coca.

Regresé a casa agotado, satisfecho y agradecido a María Jesús, a José Antonio, a Alfredo, el piñonero, a José Mª Sanz, el amigo piñero.

¡Cuánto trabajo y riqueza generan los pinares!.

lunes, 2 de noviembre de 2009

EL DÍA DE LOS DIFUNTOS.

A pesar del título no voy a plagiar a Larra. Algo de crítica social podría hacer sobre los excesos florales a los muertos, y las escaseces de afectos a los vivos, pero prefiero traer a colación recuerdos.
La verdad es que el Cementerio está precioso. Cuán distinto de aquel pobre "corral de muertos", tapias de tierra, tumbas en tierra, cruces herrumbrosas,.... del Camposanto de mi infancia. Para recordar aquello transcribo unos párrafos de "Las Crónicas".
Noviembre, "dichoso mes que empieza con Los Santos y termina con San Andrés, cuando el vino nuevo, añejo es", llegaba con sus neblinas, su tristeza, los labradores en plena sementera, y las Novenas de Ánimas.
Era un mes lúgubre: el día de Los Santos y el de Los Difuntos los pasábamos en el Cementerio, casi toda la gente del pueblo.
Tenía pocos mármoles, y menos flores: si acaso algún crisántemo de las huertas. Humildes y garabeteadas cruces de hierro, que vendían en el Comercio Grande. En su base un óvalo para inscribir el nombre y la fecha, a mano con toscas letras de pintura blanca. El pequeño túmulo de tierra desprovisto de hierbajos. En casi todas lucían faroles, desde los más humildes, incluso los cuadrados utilizados en la cuadra, obra del Sr. Emilio, "El Hojalatero", a los más lujosos, comprados, incluso en el Bazar J, como los de mi abuelo.
Para los muchachos tanta concurrencia era una fiesta. Allí pasábamos el día jugando a las cartas sobre la pared de la fachada.
Era un mes lúgubre. Las campanas sin sin cesar de tañer a muerto en aquellos atardeceres plomizos. ¡Y la Novena de Ánimas, en San Nicolás, con el túmulo en el centro...!; y los cantos fúnebres, entre escalofriantes e ininteligibles del Sr. Macario, el organista... .
Y luego, la Novena de Ánimas en Las Monjas, más terrorífica aún, con calaveras brillantes, fémures y tibias sobre el túmulo; unas monjas de clausura invisibles, que cantaban desde el alto coro, encima del de ahora, enrejado de pinchos puntiguados,.... . Escenarios para inspirar a los románticos decimonónicos.
Las calles escasamente alumbradas, o a oscuras, cuando había restricciones o averías, llenas de barro. Las aceras, escasas en mal estado. Se hacía inevitable sacar el farol, o con mucha suerte, una linterna para transitar de noche por ellas.
En otra entrada, s. D. q., les contaré como se alegraba todo con el final de la sementera, la Novena de la Milagrosa, de la Purísima, las primeras matanzas y las bodas de los jóvenes labradores.