La foto es del 25 de junio de 2.021. Venía la cosechadora camino del estreno. Es la misma que ayer le cosechó unas 30 Has., hasta que se puso a llover, cuatro gotas, a eso de las nueve, suficientes para impedir seguir cosechando. a mi hijo Álvaro.
En las dos parcelas que había echado mineral, poco, también más frescas, y que venían de veza le han salido a tres mil kilos Ha.
En otra más grande, 22 Has., no terminada, fue donde les echó la lluvia, y les falta la hondonada mejor, que venía de girasol, y sin mineral, sólo aspergis de gallinaza, a 1.500 kilos. La media de lo cosechado hasta ahora es de DOS MIL KILOS HA. De paja, un buen maraño.
Un buen maraño porque esa cosechadora es una maravilla. Diez y medio metros de corte. Lo más asombroso: el peine es flexible y se va adaptando a las irregularidades del terreno. Deja afeitado el rastrojo. Vale, sólo el peine, 100.000 euros. Es propiedad de los hermanos Mazariegos Domínguez, los de Juanito, la empresa que cultiva, ¡yo qué sé! (ahora han cogido otras doscientas y pico de Valdés, compradas por Vázquez de Prada, en Quintanilla del Monte), un montón de hectáreas en secano y regadío; no paran en todo el año.
Están preocupados por los macro huertos solares. Toda la riqueza que generan esta empresa y unas cuantas más, en manos de hombres jóvenes, en la comarca, puede verse seriamente recortada.
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DE LA FERIA. Perdonen que los primero (luego ya vendrá el elogio a quien se lo merece) sea compartir con ustedes mis nostalgias. Ya, unos días antes, cuando vi el cartel anunciando de la novillada una foto de la plaza de toros, sacada mirando a San Miguel, con la gente sobre la puerta de entrada, incluso los tejados, me entró el arreón nostálgico; pensé: ¿dónde estará toda esa gente? El caso es que yo, todo eso lo recuerdo, como si fuera ayer: las novilladas por la feria, en alguna me colé escalando el muro; la iglesia de San Miguel: la novena a la Virgen del Carmen al final de septiembre; la octava, el lunes después del Corpus; las procesiones cantando el rosario todos los domingos de octubre; la misa de bastantes domingos, a las nueve de la mañana; la cantidad de veces que volteé sus campanas; a la pequeña, tirando por una cuerda, le hacíamos perder el vuelo; a la grande, con su maza de madera, costaba mucho más trabajo tocarla a vuelo,...; todas las casicas de la gente humilde del arrabal...
Supero esa nostalgia pensando: recordar es revivir. Ese ha sido el éxito de esta feria: recordar aquellas ferias de la madera, recordar cómo era nuestro pueblo desde el siglo XIX con esa magnífica exposición de fotos. Algunos ratos pasé haciendo de cicerone.
Magnífica la recreación de la escuela de nuestra infancia. No le faltaba detalle: los pupitres, el encerado, la mesa del maestro con el brasero debajo; la enciclopedía de Dalmau Carles (le faltó alguna pizarra y su pizarrín), el crucifijo, las fotos de Franco y José Antonio; la regla, el cartabón,...
Lo de segar con la agavilladora no funcionó. Estaba mal uncida la lanza a las mulas, pero el paseo desde el yegüarizo a San Lorenzo, ya mereció la pena. Era demasiado denso el programa. No había tiempo para todo. Por ir a la siega casi me pierdo el programa de radio de Javier Pérez Andrés, anunciado en el Ayuntamiento pero realizado desde Santa María.
Muy interesante la exposición del antiguo trillero de Cantalejo: reproducción en miniatura de toda clase de trillos, aperos y utensilios en la agricultura de anteayer: tornaderos, bieldos, rastros, carros, heminas, cuartales; cribos o cedazos de varios tamaños,,, Además una demostración que cómo se incrustraban las esquirlas de pedernal en las tablas del trillo. Además de los trilleros que llenaban las Angustias de trillos los días de la feria, venían, unos días otros a reponer las que faltaban en los trillos usados.
Del coloquio sobre agricultura y ganadería, con primeros espadas (COAG, ASAJA, URCACYL, CPO, AGRINZA, y el Vice de la Junta, Juan Pedro Medina), duró dos horas. Imposible resumir. Sólo dos apreciaciones: excesivas las lamentaciones de Dujo (Asaja) sobre la mala situación de la agricultura. ¡Pobrecitos labradores! Son pocos en cada pueblo, y están "fardaos". Otra cosa es la ganadería. Con ganas me quedé de preguntarles su opinión sobre los miles de hectáreas proyectadas en la comunicad para huertos solares.
Del acontecimiento cultural, Rayanos, ya di noticia. Reitero mi crítica por las ausencias. Espero no lo tomen a mal, ni como ofensa personal. Mi elogio a los asistentes, como la mitad del salón. Todos salimos con un libro en la mano, dedicado por Ángel Infestas.
La novillada: buen juego y bonitos los erales, muy bien los chavales de las escuelas taurinas..., pero , aunque era gratis, flojísima entrada, como un tercio del aforo. Causas: ahora en junio hay mucha menos gente que en agosto; se está perdiendo la afición taurina (no así en los recortes) a marchas forzadas, sobre todo en la gente más joven. Somos, cada vez más las personas, en desacuerdo con la crueldad de la fiesta brava. Es, todavía, un poco más admisible en las corridas de toros, bichos de 500 kilos que tienen más posibilidad de hacer daño. Pero las banderillas las estocadas a esos animalicos de dos años es crueldad pura y dura.
En conjunto: muy positiva toda la programación; fin de semana festivo y animado. ¿Gracias a quién? A una sola persona. Prepararlo todo le ha llevado muchas horas, muchos días, robados a su actividad profesional en Salamanca. Y lo voy a escribir grande y en negrita. GRACIAS A FERNANDO, el de ANIANO. Ya es el colmo que hubiera de pasar una noche, la última del alcalde saliente, durmiendo en su coche en el yegüarizo para vigilar a las caballerías allí expuestas, que tienen mucho valor.
CODA.- Ayer, al pasar, camino de la huerta, por la Puerta de Villa, había un grupo de personas observando el deterioro de los cubos. Conocí al nuevo alcalde y al arquitecto. Ello me produjo una sensación de tranquilidad; saber que podemos estar tranquilos que, por fin, tenemos un regidor que se ocupa de los problemas del pueblo.
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