miércoles, 9 de marzo de 2022

EN DEFENSA DE PEDRO SÁNCHEZ.

     Les confieso que, como persona evolucionada, hace bastantes años que superé la etapa de las afinidades y el sectarismo  político, de las filias y las fobias a los gobernantes, me refiero a los nacionales, al Putin no lo puedo ni ver, a los de Bildu, aunque un poco menos, tampoco. Tengo mucho más en cuenta lo que se dice que quien lo dice,y, sobre todo, lo que se hace.

    Escucho la pregunta y la diatriba de Cuca Gamarra, PP, al Presidente del Gobierno, en el Congreso. La situación económica se está poniendo fea, fea, pero es injusto echarle la culpa de ello al Presidente. Le dice, más o menos: "es usted un experto en coartadas; primero la pandemia  tenía la culpa de la crisis; ahora es la invasión en Ucrania" . ¿Es acaso mentira que toda la crisis energética, causa de todas las subidas de precios es causa de la guerra? Es el momento de la unión para intentar hacer frente a las dificultades que tenemos encima, y no de echarse a las gorjas del adversario político. Cierto también que la postura de los partidos políticos está siendo de unión en la condena de la invasión. A los de Podemos (es tan absurda su postura) mejor, ni puto caso.

     Me esperanza la reacción universal en la ONU contra Putin. Incluso China, aún en su ambigüedad, empieza a desmarcarse. Es positiva la unión de todos los países de la UE, y de la OTAN. Las sanciones comerciales empiezan ya a afectar a la población rusa. Por mucho que el sátrapa controle los medios de comunicación, espero, ante las dificultades económicas, incluso porque algo de compasión le quede al pueblo ruso, que se produzca una fuerte contestación interna.

     Dos lecciones importantes debemos sacar en Europa de esta coyuntura.

UNA.- Crear fuentes productoras de energía para no depender tan exclusivamente de los tiranos. Si han de ser las renovables, menos papeleo y ya, ya, ya. Tiranos lo son casi todos los de la OPEP. ¡Qué bien le va a venir esto al Maduro! ¡Bueno!: hágase el milagro, aunque lo haga el diablo.

DOS.- Acercarnos al modelo productivo de los chinos.  ¿Por qué no hemos de producir tan barato como ellos?  Voy a afirmar algo políticamente incorrecto: fracaso el modelo comunista porque carecía del incentivo de la iniciativa privada, del premio personal al trabajo propio. Ahora, comunistas, dictatoriales en lo político se han pasado a un supercapitalismo en lo económico. Los trabajadores chinos lo hacen mucho más barato que los occidentales.

     Un amigo algo mayor que servidor, decía: -Yo he tenido mala suerte. Cuando vivían bien los patronos, yo era obrero. Ahora cuando viven mal los amos, yo soy amo. Quiero decir que en España trabajan mucho más los autónomos que los asalariados. ¿Cuántas vacaciones al año tienen los ganaderos? ¿Cuántas horas de trabajo echan a la semana? ¿Y el del bar?, el de la tienda, ¿el del pequeño negocio?

    Conozco un caso muy próximo: empresa que se va al garete. Uno de esos trabajadores al paro, técnico de carrera, le propone a otro compañero, muy capacitado, establecerse por cuenta propia. Crear una empresa. - Créala tú. Eres más joven. No tienes obligaciones familiares y si unos padres que te pueden ayudar. Yo voy a trabajar igual que si fuera para mí, pero prefiero tener la seguridad del sueldo.

    La empresa ha salido adelante, pero en doce años, el empresario no se ha tomado ni un mes de vacaciones; y tiene que buscar trabajo para pagar cinco nóminas y cinco seguridades sociales al mes; perder sueño y tener dolores de cabeza... ¡Amigo!: si lo bonito es que me caiga el sueldo seguro todos los meses.

    Estas grandes o medianas empresas que, por falta de trabajo o de rentabilidad, han de echar el cierre. ¿Por qué en lugar de organizar tantas manifestaciones, no forman los obreros una cooperativa, regalándoles la fábrica, y se hacen ellos los empresarios?

    No, no defiendo ese modelo de semi exclavitud de los chinos, pero sí que en occidente sería cuestión de contemplar menos ventajas sociales. Quizá más horas semanales de trabajo, menos vacaciones, como los autónomos.


    

    

No hay comentarios: