martes, 20 de noviembre de 2018

¿A SON DE QUÉ?


      Nos referimos a son de qué las declaraciones efectuadas por el alcalde efímero en La Opinión del sábado, que pego a continuación



Por si no lo leen bien les copio el titular : 

    EL ALCALDE DE VILLALPANDO CRITICA LA ACTITUD DE LA JUNTA RESPECTO AL AGUA"

     "Sanidad mantiene la restricción del uso de agua de la red, "sine die", sin explicar los motivos, algo que el regidor considera negligente".           

     Y luego, leyendo la letra pequeña, me asombro, de cómo se puede, presuntamente, mentir  e intentar tergiversar así la realidad contra toda evidencia:

 Primera (presunta porque no está sancionada) mentira: "Que Sanidad no facilitaba  al Ayuntamiento los resultados de los análisis que justificarían mantener la restricción".

      Y resulta  que hay veintiún actas y todos los análisis desde hace años, y por  supuesto los del todo el tiempo que llevamos con la restricción. Hay un dossier de 174 páginas, parte de ellas presentadas ante la Policía Judicial.

Segunda idem: Lo del SINAC (Servicio Información Nacional Agua de Consumo). Sigue insistiendo en algo que está en este blog explicado hasta la saciedad: Es el ayuntamiento de Villalpando quien cargaba, en la aplicación correspondiente, los resultados de los análisis suyos, particulares, que le hacía Biorama S.A. de encargo, de acuerdo con los cuales el agua era "APTA" para el consumo, hasta que Sanidad tomó cartas en el asunto, cargó el resultado de sus análisis y ya, desde entonces, el agua de Villalpando aparece como NO APTA.

Tercera: La crítica de que Sanidad declarara el agua de la red de Villalpando   NO APTA, sine die, "algo que considera negligente":

a).- Esa decisión la tomó Sanidad a la vista del empeño del Ayuntamiento de Villalpando en levantar la restricciòn. Ya al poco de prohibir su consumo, pidieron a Sanidad que levantara la prohibición. Durante los primeros meses del presente año, cada poco salía el alcalde diciendo que ya se podía beber. Por fin se atreve a publicar un bando, 23 de julio, levantando la restricción afirmando que según las "analíticas", las suyas", el agua cumplía con todos los parámetros.

b).- Como la historia es de sobra conocida, no la repito. Y como los análisis de Sanidad seguían dando agua NO APTA,, ya cansaditos, dijeron: NO APTA SINE DIE, y tienen razón, porque no existe ni un análisis de  Sanidad hasta la fecha en que el agua sea potable, APTA para el consumo.
    
       Entren ustedes ahora en  la página del SINAC, y lo verán, 1'6 en fluoruros.

Quinta: Aluden a un escrito en que piden que vengan técnicos de Sanidad a explicar la situación a los vecinos. Es un escrito de tres páginas con letra pequeña, en que intentan justificar la actuaciòn del Ayuntamiento, con mentiras; por ej. la ya repetida de que al mismo Sanidad no mandaba los análisis. ¿Cómo van a entrar unos técnicos en su juego de las, presuntas, mentiras? Ellos cumplen con su obligación: vigilar y controlar con los análisis, comunicarlos a los ayuntamiento, y hacer que se cumpla la ley.
     
       Debería ser el alcalde y los concejales que lo apoyan, quienes  debieron convocar acto para dar explicaciones, en lugar de abortar la petición que les hicieron el día de Santiago. Ahora ya no es necesario. Está todo muy claro.

      También les brindo la opción de contradecir en este blog mis informaciones.

     Y, ¿a son de qué sale ahora con estas declaraciones? Supongo que como consecuencia de que ya está actuando la Policía Judicial, comprobando la posibles ilicitudes cometidas en todo este affaire.
Advierto que poseen unos análisis de 2.005, con unos niveles de arsénico y fluroruros casi el doble de lo ya por entonces permitido.

      Advierto que si de estos hechos se derivan responsabilidades no pueden afectar sólo al alcalde. Todos los concejales sabían, o deberían saber, los posibles incumplimientos. Por ej.: que el Ayuntamiento no publicara en su Portal de Transparencia los resultados de Sanidad, sino los de Biorama, y sólo dos han mostrado oposición,

     Advierto, al PP de la renovación, que acabe de limpiar hasta el último rincón, que no sostenga a estos anacrónicos personajes representativos de los males peperos en el pasado: el utilizar los cargos en provecho propio: el que se aferra al sillón sin importarle la salud de sus convecinos y el que utiliza al ayuntamiento para arreglar sus chanchullos, para perseguir a quien cuenta verdades con denuncias infundadas, insultos, amenazas y agresiones, que todo el pueblo conoce. 
       




       

                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                   

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