sábado, 19 de marzo de 2011

MARIA GRANADO CURTO.

Era, hasta ayer, la esposa de Dionisio de la Puente Herrero; la madre de Maxi, Esther, Angelines, Vidal, tan buenos amigos y tan buenas personas. Como algún joven entra por aquí he de decirles que también abuela de Mª Jesús, Gonzalo, Raúl, Diego; Alba, Carlos, Celeste y su hermana, Arturo y sus hermanas.

Cuando alguna vez iba por su casa, María me demostraba cariño. Era una mujer muy afable: -"¡Pero no ves que yo nací y me crié al lado de vuestra casa....!. Si me acuerdo cuando te llevaron a casa de tu abuela, y te sacaba la rolla al sol al "Rincón de las Monjas".

-"Los críos de la vecindad nos refugiábamos del frío, jugando en ese rinconcico...! Matilde y Marino Cepeda, Carmen y Primi Gutierrez, y la de la señora Petra, algún Pachico, algún Eustaquio,...".

Un día, me parece que no tan lejano, su madre, la señora Máxima paseaba por la calle Silera. Se paró junto a la verja de nuestro patio y se le soltaban las lágrimas: -"¡Cuántos recuerdos hijo!. Aquí estaba la casa de mis padres. Aquí me crié, y aquí nacieron mis hijos..".

-"Ande, pase todavía conservamos donde su padre tenía los burros y el caballo". Y ella recordaba el portalón, el corral, todas las dependencias de la casa. Marchó reconfortada.

Son muchas las amistades que desde lejos me unen con esa familia: su padre, el Sr. Heliodoro "El Herrero", era muy amigo del tío con quien me crié, y uno de los que iban mucho por la aguardientería. Con Dionisio, el esposo, converso siempre que puedo. Es un hombre con quien da gusto hacerlo. Me honro, me encanta la amistad con Maxi y Vidal. A Angelines, con todo el respeto, le tengo cariño desde que fue alumna en aquel lejano bachillerato radiofónico. Era una niña inteligente. Con Esther y Arturo también mantengo buena relación.

Por eso, porque se lo merecen, estoy con ellos compartiendo en silencio su dolor.

Anoche, en el tanatorio, me supo a gloria el respondoso de D. Primitivo y el Padrenuestro en común. Esta tarde, s. D. q., seré uno de tantos del pueblo como les vamos a acompañar, por mi parte en el dolor y en la esperanza Cristiana.

María, la de Dionisio, descanse en paz.

2 comentarios:

ARTURO GALLEGO DE LA PUENTE dijo...

MUCHAS GRACIAS POR TUS PALABRAS DE AMISTAD HACIA MY ABUELA Y SU FAMILIA.UN SALUDO

Agapito dijo...

Es lo menos que podía hacer. ¡Gracias a ti por tu mensaje!.