LA REVOLUCIÓN QUE LLEGA: LOS MICROÓRGANISMOS EN LA AGRICULTURA.

    

    Perdonen los lectores que, por agricultores estén informados, explique unas nociones básicas, supongo, de interés general.

    La fertilidad de los suelos, toda la vida hubo tierras buenas, regulares y malas, depende de las condiciones edafológicas, arcillas, limos, arenas, mezcladas en según qué proporciones, y de la materia orgánica. Esos factores, conjugados con otros, en los que el hombre (¿pondré y la mujer, por eso de la progresía?) interviene, dan como resultado la mayor o menor cantidad de nutrientes a disposición de las plantas: la fertilidad.

   El primer fertilizante químico que empezó a utilizarse, ya antes de la guerra, aunque al alcance de pocos labradores, fue el Nitrato de Chile, el único natural. Se aplicaba, a mano, ¡cómo no!, en cobertera. Siendo yo niño, se comenzó a tirar el "superfosfato". Con ellos se consiguió un enorme aumento de los rendimientos.

    Poco a poco se fue generalizando el uso del "mineral", cada vez con muchas más marcas y fórmulas. En secano siempre con el riesgo de que lloviera más o menos. En cambio en los regadíos se vienen utilizando dosis enormes. Los de "las maíces" del páramo leonés o de los Valles, pueden llegar a echar hasta 1.000 Kg/Ha entre el N-P-K (Nitrógeno, Fósforo, Potasio) y los nitratos en cobertera, para coger 20 Tm/Ha. Verdaderas barbaridades, a lo bruto sin analizar lo suelos. Como, sobre todo el nitrógeno, es muy lixiviable, una parte de lo aportado se va a las capas freáticas, a ríos y pozos.

    Volvamos a nuestros secanos. Hasta hace unos cuantos años, lo normal es que todos tiráramos de 250 a 300 kilos/Ha. de un NPK, 8-24-12, por ej., en sementera. Luego en cobertera, según lluvias y el estado de los campos, febrero-marzo, otros 150 kgr. de Sulfato o Nitrato Cálcico (nitrógeno).

    Mas modernamente, casi todos, nos estamos decantando por abonos con nitrógenos de liberación más lenta y de una sola aplicación, pos siembra.

    Este año, llegado el momento de sembrar, dada la sequía, nadie tiraba ni un puño. Y ahora que ha llovido, ¿Qué?

    El Entec, 20-8-10 de una sola aplicación, vale a 900 euros/ Tm; un 7-12-7, a setecientos. ¿Quién está dispuesto a gastar en fertilizante, aunque el trigo haya subido, el valor  por Ha. de 1.000 kilos de trigo? y, ¿si no llueve en primavera y coges a 900 kilos, como este año?

        ¿Qué hacemos?       Me dice un amigo agricultor y mi hijo: estercolar todo lo que pueda, y donde no, centenos, avenas y vezas. guisantes...

    De estiercol, primero hay que disponer de grandes cantidades, segundo, de medios. Aún así, mi hijo, por ej., va a cubrir como una quinta parte de sus sembrados. Además el aporte inmediato de fertilizante mineralizado, que es el aprovechado por las plantas, es bajo, muy insuficiente. No obstante el aporte de materia orgánica, a medio plazo, es muy eficaz.

   La manera más fácil para ese aporte es dejar la paja picada. En cada centímetro cúbico de tierra de labor existen millones de microorganismos, hongos y bacterías, sobre todo, que se nutren y alimentan de la materia orgánica, y que transforman en sales minerales de NPK y otros oligoelementos: los nutrientes de las plantas. Otra función de los microorganismos es solubilizar los minerales presentes en los suelos, no solubles en su estado natural, para que de esa forma puedan ser absorbidos por las raíces de las plantas.

    Además existen unas bacterias muy conocidas, Rizobium, que colonizan las raíces de las leguminosas formando nódulos, y fijan el nitrógeno de la atmósfera. Por esto, sabido de toda la vida, hemos sido de los pioneros en la rotación leguminosa-cereal.

    Bien: tenemos un inmenso reservorio de nitrógeno en la atmósfera, y sobre todo en los suelos que no sean sólo arena, y en los que se haya venido aportando materia orgánica (estiércoles, paja, purines...) puede ocurrir que exista también reservorios importantes de fósforo y potasio (este abundante en las arcillas y limos de "Tierra de Campos"); si bien, sobre todo el primero de su total, un escaso 2% está en estado soluble asimilable, si el suelo es muy alcalino, pH, muy alto, (tenemos un suelo con el 9), bloquea la solubilidad del fósforo.

    ¿Y?:  como los bichos del suelo no son capaces de solubilizar todo el fósforo y potasio que las plantas necesitan, ni tampoco de tomar todo el nitrógeno de la atmósfera, después de muchos años de investigación, los científicos han descubierto, y algunas empresas puesto en el mercado un producto formado de bacterias (Azospriliumn brasislensis, pseudomonas putida,...) capaces de tomar el nitrógeno del aire y de solubilizar, al tiempo, el fósforo del suelo. Otro producto distinto fija igual el nitrógeno y solubiliza el potasio, pero no se pueden mezclar.

     Ademas de toda mi experiencia vital, ponerme al día de esto de las bacterias, me ha costado horas de estudio en internet. También he obtenido información de un técnico comercial, amigo por más o menos cliente, desde hace muchos años, Agroquímicos Rubio. Existirán más casas que vendan bacterias, pero servidor les da la información del amigo "Toño", que ha sido mi informador.

    El producto, a base de las bacterías dichas, que fija nitrógeno del aire y solubiliza fósforo, se llama Contribute IBNP,  fabricado por la multinacional ALLTEC-SPAIN.

    La dosis a utilizar, capaz de sustituir a 150 kilos de nitrato del 26, oscila entre medio y un kilo por Ha. Su precio es de 102 euros kilo.

    Es muy conveniente el análisis de los suelos. Si en el suyo no hay fósforo, mal lo puede solubilizar el Contribute IBNP. No le queda otro remedio que ir al "superfosfato"; y si no hay potasio, cosa rara, mal lo puede solubilizar el IBNK. A comprar potasa.

    Estas bacterias se pueden también utilizar en los cultivos ecológicos. Gran logro, pues los rendimientos están muy limitados por la falta de nutrientes asimilables.

    Este producto, en polvo marrón, se disuelve previamente en un caldero, antes de echarlo a la fumigadora. Es necesario incorporarlo en suelos no cubiertos por vegetación. Se puede tirar al tiempo que el glifosato.

    Álvaro lo utilizó la pasada campaña, pero dada la sequía primaveral no pudo apreciar su resultado. Creemos que el nitrógeno fijado, ahí estará, si no se ha lixiviado del todo con los setenta litros caídos en estos días. Cojo un puño de tierra, huelo, observo y veo que nuestros suelos están muy vivos. No ven la nociva vertedera, ni el fuego y sí la paja, desde hace muchos años.