LAS CARTAS DE LA GUERRA.

Me crié en esta casa, en la que vivimos, con dos abuelos paternos , Gregortio y María, y tío y tía solteros, David y Petra  Modroño Chimeno. Hace no muchos años encontré en el cajón de un viejo armario unas pocas cartas, y sobres vacios. Debe haber más en algún otro mueble, pero me da mucha nostalgia encontrar papeles y recuerdos de antes. Estas encontradas son parte de las que tenía guardadas en su macuto, el hijo, el hermano que murió en la guerra. Gil-Agapito. Mi abuelo mandó a mi tío Paco "el carretero", padre de don Primitivo, y a otro pariente, Pablo de la Nogal, sastre, padre de Margarita, a por el cadáver del hijo, cosa que no consiguieron; si bien recogieron todas sus pertenencias entre ellas estas, y más cartas, que ahora tengo delante.

El transcribirlas, aparte del valor afectivo para todos mis sobrinos, primos, y sus hijos, es por el valor testimonial e histórico que poseen. La mayoría están escritas por David. Primero desde casa, antes de que lo movilizaran, a su hermano  Gil-Agapito, ya en el frente. Luego, movilizado David, las escritas por este a casa.

Hay también muchos sobres vacíos. Les copio el de arriba, por las dos caras, dada su curiosidad. Es de una de las cartas que Antonio Modroño escribe a su hermano, en noviembre del 36, desde la Casa de Campo. La curiosidad del sobre es que es de la REPÚBLICA ESPAÑOLA. AYUNTAMIENTO DE MADRID y él es un soldado "nacional". Seguro que fue requisado de algún edificio municipal tomado a los "republicanos". Mi tío Antonio, soldado de reemplazo, y más bien de centro-izquierda, combatió en esos extramuros de Madrid, "Casa de Campo", "Ciudad Universitaria", contra las Brigadas Internacionales.

Carta  de David a Gil-Agapito

Villalpando 9 de Diciembre de 1936.

Querido hermano saluz tedeseo como nosotros a Dios gracias  ayer recibimos carta tuya al mismo tiempo de alegría tristeza por no ponernos nada de Antonio aunque ya estamos un poco mas tranquilos por Pepe Morales que decia en la carta de su madre que se habia encontrado con Antonio que al encontrarsae se dieron un fuerte abrazo pon algo de el     ya bes como te escribo en 7 días tres cartas a ber si me ganas tu pero a ber si pones de Antonio alguna cosa que de el suponemos que sepas mas que nosotros de el       ahora ha llegado Petra de misa y la a dicho Carmen qiue arrecibido carta tuya y tampoco pones nada de Antonio aunque creo que la hayas escrito antes de mandarte el telegrama   no estamos de queja contigo porque de ti porque ya veo que no eres perezoso si por no poner del que tanto nos interesamos.

Agapito ya beo que comprendes como estaré yo de renegado por la situación de esta casa aunque es mas favor hacer Alcohol para nuestro querido Ejercito Español que ir al frente que uno menos daria lo mismo pero para que vean algunos miedosos presumidos de este pueblo que no saben presumir mas que en el pueblo como Domicio "Canuto" que segun oiidas le han quitado la camisa porque hay que ir a presumir a nuestras queridas filas con nuestro querido Ejercito que tanto esta haciendo por España. Sin mas ya sabes lo mucho que te quiere ya sabes lo mucho que te quiere tu hermano que no te olvida.

David Modroño.- ARRIBA ESPAÑA

                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                     

COMENTARIO

Por  aquellos días, habían llegado al bando republicano las Brigadas Internacionales y en la Casa de Campo, Ciudad Universitaria, donde estaba Antonio, los combates eran feroces. De ahí la preocupación de toda la familia. David le insiste a Agapito porque éste estaba "cerca", en el aeródromo de Getafe,, pero estaba aquello como para ir a buscar a Antonio.

La situación de la casa a la que alude David es que de los cuatro hermanos, todos veinte añeros, tres están en el frente. Y queda él solo, haciendo alcohol, temiendo le van a llamar en cualquier momento. En cuanto a las muestras de entusiasmo por "nuestro querido ejército", hemos de tener en cuenta que ellos sabían que todas las cartas eran censuradas. Había que echarlas sin cerrar el sobre.

Continuaremos, s. D. q. con más cartas-