S.O.S. SANIDAD PÚBLICA.
Como, tratando de atraer la
atención de los lectores, algo difícil a cualquier columnista, huyo de
obviedades, omito el exordio de que la salud es el bien más preciado, etc. etc.
Ahora, como la mejor forma de
explicar, en cuanto a la sanidad, la superada situación que viví de niño, les
copio el siguiente poema de Gabriel y Galán:
Señol jues, pasi usté más alanti
y que entrin tos esos,
no le dé a usté ansia
no le dé a usté mieo...
Si venís antiayel a afligila
sos tumbo a la puerta. ¡Pero ya s'ha muerto!
¡Embargal, embargal los avíos,
que aquí no hay dinero:
lo he gastao en comías pa ella
y en boticas que no le sirvieron;
y eso que me quea,
porque no me dio tiempo a vendello,
ya me está sobrando,
ya me está gediendo!
Embargal esi sacho de pico,
y esas jocis clavás en el techo,
y esa segureja
y ese cacho e liendro...
¡Jerramientas, que no quedi una!
¿Ya pa qué las quiero?
Si tuviá que ganalo pa ella,
¡cualisquiá me quitaba a mí eso!
Pero ya no quio vel esi sacho,
ni esas jocis clavás en el techo,
ni esa segureja
ni ese cacho e liendro...
¡Pero a vel, señol jues: cuidaíto
si alguno de ésos
es osao de tocali a esa cama
ondi ella s'ha muerto:
la camita ondi yo la he querío
cuando dambos estábamos güenos;
la camita ondi yo la he cuidiau,
la camita ondi estuvo su cuerpo
cuatro mesis vivo
y una nochi muerto!
¡Señol jues: que nenguno sea osao
de tocali a esa cama ni un pelo,
porque aquí lo jinco
delanti usté mesmo!
Lleváisoslo todu,
todu, menus eso,
que esas mantas tienin
suol de su cuerpo...
¡y me güelin, me güelin a ella
ca ves que las güelo!...
¿Verdad
que es estremecedor? ¿Ustedes saben lo que era no tener dinero para ir a la
botica? Y no les cuento para ir a una
clínica privada… A los once años superé la fiebre tifoidea, “tifus”, gracias a
que mi padre pidió dinero prestado, que devolvió, para comprar la penicilina
(unos sellos, cápsulas de mal tragar), recién llegada a la farmacia del pueblo.
Y si ahora sigo vivo, y con las mismas ganas de justicia y paz que siempre, es gracias a
este gozoso sistema de salud que disfrutamos, al que estoy dispuesto a defender
a garrotazos de raciocinio, a dar la cara por el mismo.
Pero
ocurre que si ya antes del bicho, al
transatlántico de la sanidad le rebajaron el combustible, pues ya ven ahora,
empieza a zozobrar: hospitales al borde del colapso, recintos deportivos y
feriales convertidos en enfermerías…, y lo peor: los sanitarios, agotados,
empiezan a rendirse.
Y, a
causa de la pandemia mi señora lleva casi un año en lista de espera por un
problema de columna, el mismo tiempo esperando la llamen para comenzar
rehabilitación. Y un amigo recién jubilado, para poder mear (¡perdón!:
micionar), sin poder esperar a los siete meses que le daban en urología, hubo de
ir a un Hospital privado, de pago, a que le rebanaran la “prosta”.
Y empiezan a faltar médicos en los consultorios rurales, Y pediatras, y,
y, y…
Mi hija
mayor, farmacéutica, también hasta que se fue, oftalmóloga, la pequeña, tres
sobrinas (ginecóloga, internista, “112”) trabajan en la sanidad pública. He
hablado del problema con un sindicalista, Cantuche. Todos coinciden: a la
sanidad pública hay que insuflarle más dinero, para que, entre otras medidas,
pueda formar y contratar a más médicos.
También para pagar mejor a los que tiene, y no tengan necesidad de pasar
consulta por las tardes en la privada; horas a mayores que, dedicadas a la pública, paliarían mucho el problema de
escasez de especialistas. Junto con ello el decreto de incompatibilidades.
¿De
dónde sacar el dinero? Hay dos filones:
a).- Tijeretazo, con cizalla, a la montaña de cargos
políticos y a sus sueldos. Salvo excepciones, en la política se han metido a chupar los
medradores y mediocres. Encima, para vivir más, se vacunan. Lo de
Villavicencio, al lado de lo de Murcia, una minucia.
b).- Que la sanidad privada deje de recibir ni un euro del
Estado. Me parece muy bien la Clínica
del Opus en Pamplona, el Grupo Recoletas, el hospital de la Milagrosa en
Madrid, la Virgen de Regla en León… Prestan un servicio a cambio de dinero. No
estoy en contra. Sí, en cambio, a que en ellas trabajen médicos que se han
formado, MIR, con dineros públicos. Que la privada forme a sus propios médicos.
Los
principales clientes de la sanidad privada, de las compañías aseguradoras,
Adeslas, Sanitas, Asisa, Maphre…,son las mutualidades: de funcionarios, MUFACE;
de militares, ISFAS y de la justicia MUGEJU. Éstas no se autofinancian con las
cuotas de los mutualistas, sino que reciben dinero del Estado. Por esa vía,
indirecta, llegan recursos estatales a la sanidad privada. Del convenio del
SACYL con empresa privada para el mastodonte de hospital de Burgos, mejor no
hablar.
¡Pues
eso!: A ver si esto llega adonde ha de llegar, o, al menos, que la gente se
entere.
8 comentarios:
Don Agapito, con todo el respeto.
Si no tenemos más médicos en España es debido a los intereses de los propios médicos. Si la oferta fuera mayor, perderían la opción de sus jugosos pluriempleos, guardias, etc. Pasa algo así como con los labradores, de cara a la sociedad se dice que hace falta relevo generacional y bla bla bla y la realidad de cualquiera que viva en un pueblo sabe que lo que falta son tierras.
Por seguir con los médicos, su régimen de incompatibilidades es muchísimo más generoso que el de un maestro, por ejemplo. Y decir que hay que pagarlos más porque así no trabajarán por la tarde en la privada...
Me parece Vd. persona muy culta y ecuánime, pero aquí va muy desencaminado.
¿Cree usted que un maestro, después de una jornada de clase está en condiciones de dar otras 6 horas de clase por la tarde?
¿Porqué cree que un médico sí lo está?
Personalmente, después de una jornada en el Colegio para lo único que estoy es para disfrutar de una tarde de chisel o de vertedera, con música de los 80, pero no para trabajar.
Pendientes de moderación
Desconocida ha comentado "SOS: SANIDAD PÚBLICA."
7 feb 2021
Don Agapito, con todo el respeto. Si no tenemos más médicos en España es debido a los intereses de los propios médicos. Si la oferta fuera mayor, perderían la opción de sus jugosos pluriempleos, guardias, etc. Pasa algo así como con los labradores, de cara a la sociedad se dice que hace falta relevo generacional y bla bla bla y la realidad de cualquiera que viva en un pueblo sabe que lo que falta son tierras. Por seguir con los médicos, su régimen de incompatibilidades es muchísimo más generoso que el de un maestro, por ejemplo. Y decir que hay que pagarlos más porque así no trabajarán por la tarde en la privada... Me parece Vd. persona muy culta y ecuánime, pero aquí va muy desencaminado. ¿Cree usted que un maestro, después de una jornada de clase está en condiciones de dar otras 6 horas de clase por la tarde? ¿Porqué cree que un médico sí lo está? Personalmente, después de una jornada en el Colegio para lo único que estoy es para disfrutar de una tarde de chisel o de vertedera, con música de los 80, pero no para trabajar.
1 feb 2021
Primero: ¡Gracias por tu comentario y perdona que no lo haya colgado antes! Siempre son enriquecedores distintos puntos de vista.
En cuanto a que hagan o no falta más médicos, en cuanto a que haya más o menos no creo puedan decidir los propios médicos. Donde si es una evidencia que hacen falta más médicos o los que hay echen más horas es en el Sistema Público de Salud. Y, como dicen que ganan poco, que por eso han de trabajar en la privada, es por lo que opino aumenten su sueldo para que por la tarde puedan también trabajar en la Pública.
Ya ves que aludo a lo de las incompatibilidades. Ese decreto debería salir YA, para evitar el fraude que se está produciendo: médicos que reciben en su consulta privada, de pago, y de ahí, por la puerta de atrás, y saltándose las listas, derivan a esos pacientes a la Sanidad Pública. Otra cosa es cuando en la privada, por una urgencia, derivan a algún paciente a la pública, cuando en los hospitales privados de la provincia carecen de medios para la intervención requerida.
Coincidencia total en cuanto a los labradores. En los cultivos extensivos de secano (cereales, forrajes, girasoles...) sobran tractores, tractoristas; incluso jóvenes quienes lo que necesitan son tierras. Una prueba de ello son los altos precios tanto de la venta de terrenos como de su alquiler.
Ocurre que un solo labrador, con los medios actuales, puede llevar 500 Has. o más. Tampoco es bueno socialmente esas macroexplotaciones familiares de 1.000 Has. Que para vivir no hace falta tanto. La PAC debería poner un tope en cuanto a las ayudas, y debería evitarse el fraude fiscal.
O sea: para ir confortablemente escuchando música en moderno tractor, lo que sobra es gente. No así, en cambio, donde sí es necesario el relevo, o mejor, la continuidad de las explotaciones al jubilarse los titulares, es en el ovino. Las ovejas gustan mucho menos que los tractores.
Otra actividad agraria de la que huyen los hijos, es la hortícola. En Villalpando de diez que había, van a quedar dos hortelanos. Para cultivar pimientos, por ej., es necesario doblar mucho el lomo y eso no gusta. En el pueblo de los pimientos, Fresno de la Vega, han ido desapareciendo, al jubilarse, los pimienteros autónomos. Un empresario ha ido acaparando la mayoría del cultivo con mano de obra extranjera.
En cuanto a la comparación con los maestros. Yo salía de la escuela hecho unos zorros, cierto que, cuando no estuve en Villalpando, pasaba siete horas, de diez a diecisiete. Ahora con la sesión continua lo tienen más cómodo. Tampoco ahora tienen, además de ganas, necesidad de dar clases particulares, ni ocasión de hacerlo, pues ninguno reside en el pueblo donde trabaja.
Yo estudié por libre a base de clases particulares con Maestros Nacionales; lo que pasa es que aquellos en las Escuelas de Villa, se molestaban poco.
Ate cabos, si el médico después de una supuesta jornada de 7,5 horas está en condiciones de trabajar alguna hora más será porque el trabajo no es tan cansado como el del maestro. Yo ya le digo que después de un día en el colegio estoy para descansar en asiento neumático con buena música y ver cómo se mete el sol en estos limpios horizontes.
El quid de la cuestión está un concepto económico que se denomina "barreras de entrada". Aquellos oficios que las tienen, garantizan a sus tenedores unas rentas por encima de los demás.
Los médicos (sus organizaciones) ya se preocupan de limitar en lo posible el acceso a esta profesión (nunca les oirá decir que son necesarias más facultades de medicina por ejemplo), porque lo que son mozos y sobre todo mozas dispuestos a serlo es lo que sobran.
Con tierras se entiende no obstante mucho mejor. En pleno proceso de cambios en la PAC, las patronales se esfuerzan en transmitir a la opinión pública mayoritariamente urbana, que todo su interés está en "mantener vivos los pueblos" y que hay que quitar "el PAC" al malvado maestro de escuela que tiene cuatro tierras, y dársela a ellos "que pagan la SS" ¡Como si el maestro no la pagara! Por cierto, gracias a lo que paga el maestro se sufragan los complementos a mínimos de las pensiones de los autónomos, que tienen para tractores de 100000 € o comprar tierras "a tocateja" pero cotizan lo mínimo.
Coincido al 100% con usted en la horticultura. A estos voluntariosos agricultores siempre les digo que para sembrar 500 ha con la SD y tirarlas en ENTEC con el carro de 8000 kg también valgo yo, si de verdad quieres trabajar, con 1 ha de escarola estás más entretenido.
También veo mucha demagogia en los precios agrícolas. Por supuesto que valen menos que antes, ¡Solo faltaría que valiera el trigo lo mismo! No conocí las mulas, pero sí al ebro tirando por tres trillos en la era y la limpiadora toda la noche tac tac aprovechando que "cortaba bien" el solano. Me veo de niño regando los trillos para que se apretaran las piedras o mojando los escobones de barrer la era y me lloran los ojos cuando veo descargar a la cosechadora sobre el remolque desde la cabina del tractor. Y no es por el polvo.
endientes de moderación
Desconocida ha comentado "SOS: SANIDAD PÚBLICA."
Hace 2 días
Ate cabos, si el médico después de una supuesta jornada de 7,5 horas está en condiciones de trabajar alguna hora más será porque el trabajo no es tan cansado como el del maestro. Yo ya le digo que después de un día en el colegio estoy para descansar en asiento neumático con buena música y ver cómo se mete el sol en estos limpios horizontes. El quid de la cuestión está un concepto económico que se denomina "barreras de entrada". Aquellos oficios que las tienen, garantizan a sus tenedores unas rentas por encima de los demás. Los médicos (sus organizaciones) ya se preocupan de limitar en lo posible el acceso a esta profesión (nunca les oirá decir que son necesarias más facultades de medicina por ejemplo), porque lo que son mozos y sobre todo mozas dispuestos a serlo es lo que sobran. Con tierras se entiende no obstante mucho mejor. En pleno proceso de cambios en la PAC, las patronales se esfuerzan en transmitir a la opinión pública mayoritariamente urbana, que todo su interés está en "mantener vivos los pueblos" y que hay que quitar "el PAC" al malvado maestro de escuela que tiene cuatro tierras, y dársela a ellos "que pagan la SS" ¡Como si el maestro no la pagara! Por cierto, gracias a lo que paga el maestro se sufragan los complementos a mínimos de las pensiones de los autónomos, que tienen para tractores de 100000 € o comprar tierras "a tocateja" pero cotizan lo mínimo. Coincido al 100% con usted en la horticultura. A estos voluntariosos agricultores siempre les digo que para sembrar 500 ha con la SD y tirarlas en ENTEC con el carro de 8000 kg también valgo yo, si de verdad quieres trabajar, con 1 ha de escarola estás más entretenido. También veo mucha demagogia en los precios agrícolas. Por supuesto que valen menos que antes, ¡Solo faltaría que valiera el trigo lo mismo! No conocí las mulas, pero sí al ebro tirando por tres trillos en la era y la limpiadora toda la noche tac tac aprovechando que "cortaba bien" el solano. Me veo de niño regando los trillos para que se apretaran las piedras o mojando los escobones de barrer la era y me lloran los ojos cuando veo descargar a la cosechadora sobre el remolque desde la cabina del tractor. Y no es por el polvo.
Pendientes de moderación
Desconocida ha comentado "RECORDANDO A SERGIO DE PRADA."
10 feb 2021
Los médicos de la pública trabajan cinco horas como mucho. Si hacen falta más, para suplir a los que se van jubilando. Sobre todo es necesario que trabajen más horas en la pública. La Sanidad rural, con esto de la pandemia, está de pena.
Conozco a pocos maestros, no sé si a uno o dos, que además vayan con el tractor. No me parece mal que maestros, procuradores, empleados de donde sea, como segunda actividad tengan la agricultura. Si no cotizan a la Seg. Soc. por esa actividad ya lo hacen por la principal en la que trabajan. Yo también cuando ejercía, los fines de semana y en las vacaciones, todo el verano en la huerta con las zanahorias, cogía el tractor. Teníamos pocas tierras. Mi mujer era ama de casa y teníamos cinco hijos.
Si es un fraude que prejubilados de banca, con cincuenta años o menos, lleven directamente una explotación agropecuaria, todos los días del año, al tiempo que cobran buena pensión.
Los precios agrícolas están sujetos a la ley de la oferta y la demanda mundiales. Para compensar las rentas agrarias están las ayudas de la PAC. Estoy harto de oír la garrulada de que nos paguen el trigo más, como antes, y no nos den lo de la PAC. Para pagar por encima de los precios de mercado tendría que ser con ayudas estatales, lo que sería primar excedentes, cuando los había.
A los nostálgicos de cuando el trigo valía, les hacia yo ser jornalero de sol a sol, cuando con tres kilos de trigo se pagaba un jornal. Esa carestía del trigo en la posguerra obedecía a los 900/ Kg/Ha de producción los años buenos, y obtenidos con mucha y barata mano de obra. Es lacerante que tengan nostalgia de cuando las hambres y las miserias.
Yo creo que entonces estamos de acuerdo. Lo que traté de decir es que lo que no sería normal es que el trigo valiera "como antaño". El incremento de productividad ha sido extraordinario y por lo tanto se puede producir mucho más barato. ¡Si ni siquiera tocamos el grano con la mano!
Pendientes de moderación
Desconocida ha comentado "SOS: SANIDAD PÚBLICA."
Hace 21 horas
Yo creo que entonces estamos de acuerdo. Lo que traté de decir es que lo que no sería normal es que el trigo valiera "como antaño". El incremento de productividad ha sido extraordinario y por lo tanto se puede producir mucho más barato. ¡Si ni siquiera tocamos el grano con la mano!
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