EL INCENDIO DE COBADÚ.

 

Rafael Sánchez descarta la posible combustión espontánea por la fermentación de alguna paca en Cobadu.

      Cuando me dieron la noticia me produjo mucho disgusto. Primero por la relación cordial con su Presidente, promotor  y padre, Rafael Sánchez Olea. Segundo: porque una desgracia para Cobadú repercutiría en toda la provincia, en toda la economía de labradores y ganaderos de la región.

      Este año nuestra cooperativa Agrinza, asociada a la "Bajo Duero", ha recibido más CUARENTA MIL TONELADAS de cereal, que comercializamos con ellos. Como gigantescas hormigas los trailer no han dejado de llevar grano todo el verano, y aún siguen. Cobadú lo transforma en pienso compuesto para vacuno de cebo, de leche; ovejas, cerdos, pollos de engorde..; a la granja de mis hijos  y a miles, millones de kilos, les surte Cobadú. Ahí queda el valor añadido. Todo en beneficio de los socios.

    Como siempre que arden pacas, algo que ocurre con cierta frecuencia, todos los años alguna nave se quema, siempre le echamos la culpa al empaque con humedad, fermentación y combustión espontánea; algo que, por mi experiencia, siempre pongo en duda. Y así ha ocurrido con el fuego de Cobadú. Nada más tener noticia del incendio, lo de siempre: "alguna paca con exceso de humedad", lo que, de inmediato, puse en duda.

    Pues ya ven. Rafa lo confirma. El fuego comenzó en una nave en que no había alfalfa, sino maquinaria.

     El heno de alfalfa que Cobadú almacena empacado, ha llegado a granel a la factoría. En la deshidratadora le han quitado la humedad sobrante. Suele llegar con un 20-25%, y la dejan en un 12%. A la salida del troner, horno, la refrigeran y  pasa al tubo de empacado de donde, como churros, salen pacas con una enorme presión y peso, listas para llevar a las granjas o, incluso, exportar.

     La alfalfa, mucha, que se utiliza para el pienso compuesto, es transformada en harina y en gránulos, éstos también para consumo directo de rumiantes.

     La deshidratadora posee un sistema para quitar los cantos que pueden ir con la alfalfa. Ellos, al sobrecalentarse en el troner pueden ser origen de incendios, algo que controlan día y noche.

     ¡Bueno!: Lo importante la ausencia de desgracias personales, y la relativa menor importancia de las pérdidas. Lo que se ve en las fotos 

no se corresponde con el texto de algunas noticias, donde dicen que se han quemado "varias naves", en otro lugar que "seis naves", llenas de pacas de alfalfa. Si eso fuere así serían millones de kilos de prensadas pacas que estarían en combustión muchos días por más agua que le echasen. En la foto se ve ya poco humo y menos de seis naves. El resto de la factoría sigue intacto funcionando como de ordinario.

     Vuelvo a lo de la "combustión espontánea" por "calentarse" el forraje, de alfalfa y veza, normalmente, a la que tanto miedo tenemos. He sido durante muchos años escéptico a esa posibilidad, pero ante algunos incendios de pacas en naves, ya no sé qué pensar. 

     En el año 1971, Luis "el Currero", dueño de la primera empacadora, una Batlle que entró en el pueblo, me hizo las primeras pacas de alfalfa. Desde entonces acá no creo haya habido año en que, más o menos, algo hayamos empacado en casa.

      En el "setenta y dos", ya cargué dieciocho camiones para los de entonces, UTECO de Orense, ahora COREN. En el 73 amplié el mercado a Asturias. Cien camiones, con el cargapacas al costado, cargué (me ayudaba arriba a colocarlas el labrador o un trabajador que yo cogía)  y mandé, comprada a los labradores, para ganaderos de Galicia y Asturias. Todo, y hasta muchos años después, con paca pequeña. Miren si no tendré experiencia del problema del empacado: que si más o menos rocío, que va a llover y la pilla, que llueve y la pilló,...La mercancía iba sin cobrar, como para mandarla húmeda. Con los de Coren tenía menos problema. Alguna marchó para allá de una parcela de los Toranzos en Ctª Tapioles, echando agua. Me di paliza a cargarla y nada gané. Éramos amigos y vecinos. Cierto que sus hijos otros favores gordos han hecho a los míos.

        La paca pequeña con humedad, podía quedar en la tierra unos días puesta de canto y secaba, pero con las de ahora, con las grandes, con el paquetón, es otra historia. Ya sé de algún camión devuelto de Asturias a Villalobos. Exige empacarla en el momento óptimo: primero, ha de estar bien seca, que a la postura el sol se desbrone entre los dedos, y luego, aprovechar "la marea" de la noche, o pasado el rocío fuerte de la mañana, para empacarla con la humedad justa para que no se deshaga. Y siempre con la pica en el tractor; que si al pinchar te da "catorce" de humedad, de allí a unas horas te dará el "veinte".

      En los primeros años de la paca grande, antes de que aparecieran las "picas" lee humedad, el noventa por ciento de las pacas se calentaban. Si la calentura no era muy grande, cogían, por dentro, color de tabaco y conservaban mejor la hoja. Había ganadero que las prefería así. Si la humedad era mayor podían coger moho, pero nos enterábamos en el invierno, al abrirlas. 

      Hace unos años medio llenamos la nave con pacas forraje de veza, que algo fermentaron. Las vendimos en invierno tan ricamente. Lo que ocurre es que las pacas pueden admitir, calentándose poco, hasta un 20% de humedad, lo que supone muchos kilos, que pierden durante los meses de almacenaje.

    Ahora tanto los empacadores como los labradores se han profesionalizado mucho. El nuestro, (de los Modroños , "Lorencito" y mucha más gente) David Áres, "Talico" es un gran profesional. Si llega la tierra y no hay "marea", se pone a dar una cabezada, y si hay mucha, igual, espera. Entre Emilio y Álvaro M., más el primero, bastantes camiones facturan todos los años para Asturias, principalmente.

     En esta cosecha una moderna rotoempacadora ha entrado en la comarca: Antonio Alegre de Quintanilla del Monte.

     Son rotoempacadoras las que confeccionan las balas, pacas cilíndricas; las bolas que dice la gente. Se pueden utilizar para empacar en verde y plastificar, micro silos; para el heno y para la paja. La novedad, para la paja, de esta moderna rotoempacadora, además de confeccionar pacas perfectamente cilíndricas, muy densas y forradas de malla, es que, opcionalmente, trilla la paja, lo que supone una gran ventaja para la cama en las naves de pollos; también suponen ventaja, al ser cilíndricas y rodar por la nave para cubrirla. Todas las cilíndricas, para el transporte en camiones tienen inconveniente.

    Resumiendo: que lo de Cobadú, aunque cornada no es tan grave; que especialistas de León están estudiando las causas del incendio y que veremos si el "toro" estaba dentro o vino de fuera.