Grupo de soldados nacionales en la sierra de Guadarrama. Sobre marzo de 1937 sería. Observen las carencias en el uniforme, y las ganas de bromas. Uno incluso saluda puño en alto. El de la gorra, agachado, con cara de tristeza (habían matado a su hermano pocos días antes) es David Modroño. Todos son, como el 80 % al menos de los combatientes nacionales, soldados de reemplazo, llevados a la guerra sin gana alguna.
CONTRA LA TERGIVERSACIÓN HISTÓRICA.
Uno no puede estar de acuerdo con tanto
sectarismo, con tanta tergiversación histórica.
He
escrito "Víctimas de la guerra civil en Villalpando", para rescatar
del olvido a las víctimas del uno y el otro bando.. Conozco a fondo todo lo
sucedido en mi pueblo y en España en el siglo XX.. Y con la independencia de
historiador, sin filias y sin fobias, sin adscripción partidista, no opino;
sino que, muy en resumen, informo:
En el marco de una sociedad llena de
pobreza e injusticias, la guerra civil española fue el enfrentamiento de dos
ideologías contrapuestas: izquierdas contra derechas;, azules contra rojos; derechistas
contra comunistas, anarquistas y los revolucionarios del PSOE.
Eran dos formas antagónicas de entender la
sociedad: colectivismo (ejemplo ruso) contra propiedad privada (llena de
excesos); laicismo (con su punto de razón), contra catolicismo (aunque con
defectos y exceso de curas y monjas, tan arraigado en la humilde clase media,
la alta y las mujeres de la baja); amor libre (que apenas se practicaba),
contra “moral” católica y familia (aunque el vínculo familiar siempre fue
fuerte entre los de izquierdas).
Los republicanos moderados, centristas de
izquierdas y derechas, se vieron desbordados por los extremos. Aquella II
República no fue aceptada por los anarquistas, por ser burguesa, quienes
estaban por la revolución ya, directa, sin más.
Los Comunistas pretendían llegar la
Dictadura del Proletariado, desde la democracia.
Hubo
varios intentos de alzamiento revolucionario, para imponer sus ideas a la
fuerza, por parte de las izquierdas: la invasión de anarquistas desde Francia
por Vera de Bidasoa y Cataluña. Fermín y Galán en Jaca. Y el más serio: la
Revolución de Octubre de 1934, contra un gobierno de derechas, aperitivo en
Asturias de la Guerra Civil. Por parte contraria lo de Sanjurjo, que fue una
chirigota.
A partir del triunfo del Frente Popular en
las elecciones de febrero del 36 en
España se vivía un ambiente pre bélico, lleno de episodios con muertos y
heridos, que venían de lejos. Hasta en Villalpando los hubo.
Ahora la gran falacia maquiavélica que se
está instalando es que los llamados, recientemente republicanos, antes rojos, eran los
demócratas y los buenos. Y los antes llamados nacionales, ahora fascistas, eran
los dictadores malos
¡Pues no!: cada uno tenía sus razones, sus
ideas, su idealismo, su maldad, su crueldad… Atrocidades las hubo por ambos
bandos. Más por parte de los franquistas, por el hecho de ser vencedores. Sobró
crueldad y represión por parte de Franco en la posguerra, aunque no sabemos qué
hubieran hecho de haber vencido ugetistas, comunistas y anarquistas. A
tenor del antecedente ruso, cuando el triunfo de los bolcheviques en 1917, podemos
imaginarlo. Les recomiendo lean "La Revolución rusa contada para excepticos" de Juan Eslava Galán. Acabo de hacerlo.
Es evidente, para quien quiera ir a las hemerotecas de la época, para quienes conocimos a los protagonistas, y lo vieron y dijeron personajes tan ilustres como Marañón y Ortega y Gasset: DE AQUELLA GUERRA CIVI, según quiénes fueran los vencedores, SALDRÍA UNA DICTADURA DE IZQUIERDAS O DE DERECHAS.
Es evidente, para quien quiera ir a las hemerotecas de la época, para quienes conocimos a los protagonistas, y lo vieron y dijeron personajes tan ilustres como Marañón y Ortega y Gasset: DE AQUELLA GUERRA CIVI, según quiénes fueran los vencedores, SALDRÍA UNA DICTADURA DE IZQUIERDAS O DE DERECHAS.
De
aquella dictadura de derechas, pasados años de hambrunas, (país destrozado por la guerra, sequías, aislamiento internacional) salió el mayor
desarrollo económico y social jamás conocido.
En 1945, acabada la II Guerra Mundial, las potencias vencedoras expulsaron de la ONU a la España de Franco, retiraron los embajadores y nos declararon el boicot comercial. Encima aquel año no llovió. Fue el famoso "año malo".
Pronto entre los aliados, desaparecido Hitler, el enemigo común, surgió la tensión, el conflicto. ¿Cómo iban a entenderse las democracias occidentales con otro régimen más poderoso y tan totalitario como el nazismo, con el otro cruel genocida Stalin?
Empezó la guerra fría: comunismo soviético en expansión contra el mundo libre. Surgen el Pacto de Varsovia y la OTAN; la carrera armamentista, bombas atómicas, misiles nucleares, conquista del espacio...Es entonces cuando se valora la actitud de Franco frente al Comunismo. Regresan los embajadores, se nos abren los puertos y mercados, se instalan bases americanas, nos regalan queso y leche en polvo, cuando ya no teníamos hambre, que no había quien tragara, hasta nos visita un Presidente Americano...
Empiezan a llegar turistas; remesas de "francos" y "marcos" de los españolitos por la Europa reconstruida con el Plan Marshall... El resultado es el por todos conocido: de la alpargata al "seiscientos"; de las mulas al tractor; de los carros a los camiones: fábricas, ferrocarriles, carreteras, hospitales, escuelas, seguridad social...
Y a la muerte, en la cama, de Franco, los españoles con la barriga llena, el pisito (barriadas enteras de viviendas sociales a las que accedían los obreros sin hipotecas ni desahucios ), el "127", el Real Madrid, Massiel, Lola Flores, Manolo Escobar y El Cordobés, sin apenas paro, ni delincuencia (8.000 presos, frente a los más de 80.000 de ahora, sin apenas impuestos ni deuda externa) no queríamos líos. no había masas clamando contra el régimen.
Y desde los sectores aperturistas del mismo se optó por la transición a la democracia, que fue bien vista por la mayoría, que contó con el consenso de los partidos de izquierdas.
Existía un franquismo sociológico. El mismo que votó a UCD y AP, cuando Adolfo Suárez, ganó las dos primeras elecciones.
Felipe González, un social demócrata, renunció al marxismo, y una parte de gente conservadora, anteriores votantes de UCD, le votó en la aplastante mayoría de 1982, y siguientes.
Fueron los comunistas españoles los únicos que no se doblegaron ante el franquismo, que desde la clandestinidad, jugándose el tipo, primero el maquis, emboscados en guerrillas, en los cuarenta, y el resto de infiltrados comunistas durante toda la dictadura, conspiraron continuamente contra Franco. Cuando llegó la democracia, acordada en parte con su lider, Santiago Carrillo, se vio la fuerza que el PCE tenía, veinte diputados en las elecciones de 1977.
Otro error clamoroso es atribuirle a Franco, en exclusiva, la sublevación militar. Ésta fue obra de todos los generales, de la inmensa mayoría de los mandos. Contó el apoyo de la Iglesia Católica, de la Falange, y de la mitad del pueblo español.
En 1945, acabada la II Guerra Mundial, las potencias vencedoras expulsaron de la ONU a la España de Franco, retiraron los embajadores y nos declararon el boicot comercial. Encima aquel año no llovió. Fue el famoso "año malo".
Pronto entre los aliados, desaparecido Hitler, el enemigo común, surgió la tensión, el conflicto. ¿Cómo iban a entenderse las democracias occidentales con otro régimen más poderoso y tan totalitario como el nazismo, con el otro cruel genocida Stalin?
Empezó la guerra fría: comunismo soviético en expansión contra el mundo libre. Surgen el Pacto de Varsovia y la OTAN; la carrera armamentista, bombas atómicas, misiles nucleares, conquista del espacio...Es entonces cuando se valora la actitud de Franco frente al Comunismo. Regresan los embajadores, se nos abren los puertos y mercados, se instalan bases americanas, nos regalan queso y leche en polvo, cuando ya no teníamos hambre, que no había quien tragara, hasta nos visita un Presidente Americano...
Empiezan a llegar turistas; remesas de "francos" y "marcos" de los españolitos por la Europa reconstruida con el Plan Marshall... El resultado es el por todos conocido: de la alpargata al "seiscientos"; de las mulas al tractor; de los carros a los camiones: fábricas, ferrocarriles, carreteras, hospitales, escuelas, seguridad social...
Y a la muerte, en la cama, de Franco, los españoles con la barriga llena, el pisito (barriadas enteras de viviendas sociales a las que accedían los obreros sin hipotecas ni desahucios ), el "127", el Real Madrid, Massiel, Lola Flores, Manolo Escobar y El Cordobés, sin apenas paro, ni delincuencia (8.000 presos, frente a los más de 80.000 de ahora, sin apenas impuestos ni deuda externa) no queríamos líos. no había masas clamando contra el régimen.
Y desde los sectores aperturistas del mismo se optó por la transición a la democracia, que fue bien vista por la mayoría, que contó con el consenso de los partidos de izquierdas.
Existía un franquismo sociológico. El mismo que votó a UCD y AP, cuando Adolfo Suárez, ganó las dos primeras elecciones.
Felipe González, un social demócrata, renunció al marxismo, y una parte de gente conservadora, anteriores votantes de UCD, le votó en la aplastante mayoría de 1982, y siguientes.
Fueron los comunistas españoles los únicos que no se doblegaron ante el franquismo, que desde la clandestinidad, jugándose el tipo, primero el maquis, emboscados en guerrillas, en los cuarenta, y el resto de infiltrados comunistas durante toda la dictadura, conspiraron continuamente contra Franco. Cuando llegó la democracia, acordada en parte con su lider, Santiago Carrillo, se vio la fuerza que el PCE tenía, veinte diputados en las elecciones de 1977.
Otro error clamoroso es atribuirle a Franco, en exclusiva, la sublevación militar. Ésta fue obra de todos los generales, de la inmensa mayoría de los mandos. Contó el apoyo de la Iglesia Católica, de la Falange, y de la mitad del pueblo español.
En principio, quien dirigió las
operaciones, fue el general Mola. Muerto éste en accidente aéreo, reunidos en
Burgos, el resto de los generales nombraron Generalísimo a Francisco Franco.
Insisto en que la represión en la
posguerra fue excesiva. Terrible lo de las “Trece Rosas”, por ej., lo de Miguel
Hernández, lo de miles y miles. Que fue
doloroso e injusto el exilio. Me duele el de Antonio Machado y su madre; el de
Azaña…, el de todos.
Tampoco se cuenta la verdad en lo de
la ayuda extranjera: Sí, a Franco le ayudó Juan Marx, y Alemania e
Italia. Pero a los republicanos los ayudó (a cambio del
oro español) Rusia y las Brigadas Internacionales.
Quienes conocimos a los
protagonistas, la situación de antes de la guerra en este pueblo y en toda
España, sabemos que las masas jornaleras (y no sin razón) lo que pretendían era
“dar la vuelta a la tortilla”. Que en las Casas del Pueblo se discutía cómo se
iba a repartir la propiedad de los grandes terratenientes.
Y durante la guerra se radicalizaron
mucho más las posturas. Los de
izquierdas, luchaban por la revolución. El Gobierno republicano nada pintaba.
El poder efectivo estaba en manos, de la
CNT, la UGT y el PCE. Si en plena guerra, en Aragón, los anarquistas llevaron a
la práctica sus ideas colectivistas… Repasen
las hemerotecas de aquellos años. Los carteles con la propaganda de
ambos bandos.
Y no critico esa postura. En
aquellos años, aquellas masas desposeídas en el Comunismo, Soviético o
Libertario, veían su redención.. La dictadura del proletariado, a imagen de la
URSS (que en aquellos años encandilaba a los obreros), y/o el Libertarismo Anarquista,
casi con seguridad se hubieran
implantado.Las ideas de Dolores Ibarruri, Largo Caballero, Santiago
Carrillo, Federica Monsetny, Victoria Ken, José Diaz, Negrín,,, , los Lenin,
Trosky, Stalin… españoles, se hubiera impuesto sobre el democrático pensamiento
de Azaña, Indalecio Prieto, Alcalá Zamora, Aranguren, Besteiro,.. Otra cosa es qué hubiera ocurrido, cómo
hubiera reaccionado Hitler con una España comunista y/o libertaria.
Y ahora, en el ocaso de las ideologías, por culpa de la corrupción en los dos grandes partidos, y por los excesos del capitalismo, surgen los populismos (y rebrotan los viejos nacionalismos, nunca desaparecidos) : Podemos en España, a quien saludé con alegría por sus promesas de regeneración, pero con cuyo neo comunismo estoy muy en desacuerdo.
Y ahora, en el ocaso de las ideologías, por culpa de la corrupción en los dos grandes partidos, y por los excesos del capitalismo, surgen los populismos (y rebrotan los viejos nacionalismos, nunca desaparecidos) : Podemos en España, a quien saludé con alegría por sus promesas de regeneración, pero con cuyo neo comunismo estoy muy en desacuerdo.
Pido que, por escribir esto, nadie
me encasille políticamente. Lo hago desde la objetividad del historiador. Mis
ideas regeneradoras social liberales, democráticas, las he expuesto hasta la
saciedad. Doy más valor al trabajo que al capital, también que se premie la
capacidad y el esfuerzo de cada uno, y no se alcahuete la vagancia; amo la justicia social,
defiendo que la propiedad privada no sea un dios y cumpla una función social, Por
ej.: pondría un gravamen a todas las viviendas deshabitadas, para fomentar un
alquiler o una venta asequibles a los ingresos más bajos.
Y siendo coherente con esas ideas, ya conocen
mi lucha contra las acciones corruptas y prepotentes, de cierta derecha actual.
Actitudes ( corrupción, chulería, incultura, violencia, agresividad...), que
están en los genes de algún que otro individuo, escasos por suerte, en algún
que otro pueblo.
Refrendación del voto en 1940, para dar gracias a Dios por el "triunfo en la cruzada contra los rojos"
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