CHULERIA DE TASCA.
Esa fue la
actitud adoptada anteayer en el Congreso de los Diputados por el Sánchez.
Incapaz de
responder a todas las preguntas que le hizo Feijóo, cuando le informó de que
tendrá que comparecer en el Senado, ante la Comisión de Investigación, su
reacción, coreada por la “Chiqui”, fue la de carcajadas; unas risas “muy
divertidas”…
Cuando la
Armengol le dio la palabra para el turno de réplica, con una chulería de
patibulario, lo único que dijo, con mucha guasa, fue: ¡Ánimo Alberto!
Con la que
está cayendo. ¡Qué cara más dura!
¿A ver qué
disculpas ponen a las evidencias reflejadas en los informes de ayer de la UCO,
complementarios y explicativos a lo expuesto al de las 289 páginas?
Tales
veraces informaciones son tomadas de los correos intervenidos y las
conversaciones entre los móviles de los miembros y miembras, las mujeres, de la
trama.
Iban a
Ferraz a por el dinero Joseba, el hermano de Koldo y la, entonces, mujer de
éste, Patricia Úriz: -“Cariño, me llamo
ayer Celia que podía ir a buscar el dinero y, según me dijo, el de “Jose”
Queda muy
claro que en la jerga de mafia “las chistorras” son los de 500 euros, los
“soles” los de 200, y las “lechugas” los de 100. También que los “folios” que
pedía Ábalos para la fotocopiadora del Ministerio, billetes.
En un
correo dice Patricia Úriz: -“Si los
cálculos los hemos hecho bien no necesito ninguna chistorra más” (menciona
2.000). ¡UN MILLÓN DE EUROS!.
En estos
informes va saliendo basura a montones: los diversos pagos a las amigas de
Ábalos, por alquileres de pisos, dinero en metálico, joyas de regalo; la juerga
en el Parador de Teruel negada por Pilar Alegría; pago de la pensión al hijo
pequeño de Ábalos; un viaje exprés de ida y vuelta de Valencia a Madrid a dos
rumanas, Ofelia y Rozalen…
La táctica
del “uno” y subordinados es negarlo todo. Pongo un ejemplo.
Senado,
Comisión de investigación, comparece Pilar Alegría. El Senador del PP, Alejo
Miranda le hace preguntas concretas para que responda si o no:
"¿Es cierto
que el hermano del Presidente ha estado alojado durante bastantes días en la
Moncloa?
¿Es cierto
que fijó su residencia en Portugal para evadir a la Hacienda española?
¿Es cierto
que Begoña Gómez ha utilizado los servicios de una funcionaria de Moncloa para
sus fines particulares?
¿Es cierto
que influyó en la concesión de contratos a Barrabés?
¿Es cierto
que una empresaria dejó 90.000 euros en Ferraz?. Así etc. etc"
Hizo lo de
todos, no contestar e insultar. Lo más gordo que dijo (aparte de lo manido) fue
reprocharle a este Senador, que lo era por Cuenca y vivía en Madrid. Hubo de llamarla al orden el Presidente porque hablaba de nada relacionado con lo preguntado.
Ayer escuché
a la Diputada del PP por León, Ester Muñoz, preguntarle a la Ministra de
Hacienda, por parte de estas cuestiones concretas de la actual corrupción del
PSOE. Aunque le advirtió que contestara sin usar el manual (Franco, el aborto,
el genocidio,…) nada, “La Chiqui”, a lo suyo, y, cómo no, otra vez a meterse
con el PP: “Aznar, Sr. de la guerra por lo de Irák, en 2004; la pasada corrupción…
Esta chica
de León, la dejó aplastada. –“Corrupciòn,
antigua y de siempre la del PSOE, “Filesa, Malesa Teim Sport, Roldán, Irralburu
Mariano Rubio, los GAL, los ERES…”
Desde que yo estoy en el PP mi partido está limpio.
Cuando la Gürtel yo estaba en la Universidad, pero usted ha gobernado en
Andalucía cuando los ERES. Cuando lo de Aznar yo era una niña. A este paso le
van a echar la culpa al PP de la expulsión de los judíos por los Reyes
Católicos”.
Volviendo
al “Uno”: en las carcajadas cuando Feijóo le comunicó lo del Senado, y en la
chulería, en lugar de responder a las contundencias de éste, de saltar,
riéndose, con el ¡”Ánimo Alberto!, yo sentí se estaba riendo de mí, se estaba
riendo de todos los españoles, se estaba riendo de la democracia y de la
Constitución.
Es una
actitud típica de los chulitos. La he visto también en algún chulito derechil;
la fanfarronería cuando mandan, y el hacerse los pobrecicos, para dar pena
cuando, están ante jueces y/o en dificultades.
El Sánchez
prepotente, guasón, de las risas frecuentes en el Congreso es el mismo
lloriqueante, pidiendo perdón cuando metieron a Cerdán en la cárcel; el mismo
que huía en Paiporta como conejo asustado.
La catadura
moral de estos individuos es muy discutible.
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