NUEVO ACTO DE AMENAZAS Y AGRESIÓN.

        Y ya no sé cuántos van. No voy a entrar en detalles. Hubo tantos testigos que la noticia correrá por el pueblo.

     Ocurrió en la puerta de Isaac donde tenía instalado el puesto de venta de pimientos. Fueron protagonistas cuatro mujeres, a las que despachaba, y un hombre que se interpusieron, mientras pudieron, para evitar que el valentón me agrediera.

  

  Yo, como soy muy cobarde, me iba apartando, hasta que rompió la barrera y me soltó una patada. Seguro que el valentón, muy ufano, alardeará de que me dio una patada en los c...

     No sé si antes o después, furioso, la emprendió con la báscula. No sé si la podremos arreglar.

     Pero ni voy a ir al Centro de Salud, ni al Cuartel de la Guardia Civil. Al Juzgado de Villalpando le he cogido alergia.  Si ante este hecho, tan repetido como público y notorio la autoridad competente quiere aplicar el Art. 303 (cito de memoria) de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, sobre la iniciación de un procedimiento de oficio en los casos en los que un ilícito penal sea público y notorio, repito, allá su conciencia. Detalles del hecho y de las personas que lo presenciaron puedo darles. Además, ante esta situación, si alguien no corta, puede ocurrir una tragedia. ¿Qué hubiera ocurrido si llega en ese momento alguno de mis hijos? Además no me es posible salir de casa acompañado siempre por alguno de ellos, o de escolta. Lo de este valentón es muy reiterativo. Pero a base de violencia no van a coartar un derecho constitucional a la libertad de expresión.

    Si llevan casi cuatro años intentando  quebrantar mi libertad de expresión con todos los muchos medios a su alcance, no van a impedir que ahora, la utilice para contar la justa sentencia de la Audiencia Provincial. En todo ello asesorado por mi Abogado.

     En cuanto a las fotos son las mismas que llevan años circulando, emitidas por ellos, por todas las redes sociales. Deberían agradecerme no copie integra la de la placa de la PLAZA DE TIENTAS... Ni otra que tengo de padre e hijo, el que quiso ser torero, dentro de la misma.

     Lástima de una que hubiera retratado lo ocurrido sobre las trece treinta en la Plazuela de las Angustias.