sábado, 26 de octubre de 2013

DEJARAN DE SER PRESOS PERO SEGUIRÁN SIENDO ASESINOS




Por triste que sea reconocerlo, las víctimas han ocupado un lugar marginal en la lucha contra el terrorismo y sus secuelas.

Durante los años ochenta y parte de los noventa, prácticamente fueron ignoradas. Después, durante un tiempo, adquirieron cierta visibilidad y se les dio más protagonismo. Fueron los años del pacto antiterrorista y de la Ley de Partidos, los años en los que ETA y su submundo quedaron acorralados y señalados como lo que son: una banda criminal y totalitaria. Pero esos años pasaron, y llegaron los de la negociación. Y entonces las víctimas volvieron a ser, sobre todo, un incordio.

Si no hay víctimas, no hay crimen. Si las víctimas se marginan, el crimen se diluye. Desde hace tiempo, todo el debate sobre el terrorismo gira en torno a los presos. Así se les llama, sin más: los presos.

Presos ha habido siempre. El hecho de serlo ni significa ni siquiera haber hecho nada malo. Todas las dictaduras tienen presos de conciencia, presos políticos que lo son por ejercer una libertad que está prohibida.

Sin duda, Inés del Río, Henri Parot y compañía son presos. Pero son algo más: convictos por múltiples asesinatos que sufren condena en un país democrático. El día que salgan de la cárcel dejarán de ser presos, pero serán criminales hasta sus últimos días.

Sin embargo, todo la estrategia del mundo de ETA-Batasuna (los Sortu, Bildu, Amaiur, Herrira...) pasa por convertir a esos "presos" (a esos criminales) en víctimas.

Víctimas de un Estado represor, de un simulacro de justicia, de un conflicto ancestral... Una vez cumplida su pena, se reincorporan a la sociedad entre homenajes y aurreskus. Y, por supuesto, no se puede admitir que se les recuerde que si estuvieron en la cárcel fue porque mataron a alguien, porque causaron verdaderas víctimas que nunca podrán volver a su casa.

ETA y su mundo celebra todo: celebraba los asesinatos cuando los había y celebra las sentencias cuando les conviene. Hoy, tras el fallo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, hay que recordar que ellos son lo contrario a la democracia, a la justicia, y a los derechos humanos. Que simplemente se sirven de las instituciones cuando les interesa, y las socavan por medios criminales cuando no. Ellos siempre celebran, pero eso no quiere decir que debamos concederles victorias que no les corresponden.

La sentencia habrá que cumplirla, porque la democracia, aquello que ETA ha luchado por destruir, no va a rendirse. Pero el Gobierno tiene margen de maniobra para aplicar el fallo pensando en las víctimas. Tal y como ha pedido Rosa Díez, debe actuarse sin violentarlas. Hay que hacer un esfuerzo por recordar que las personas que verán rebajadas sus penas son los asesinos de cientos de ciudadanos con nombres y apellidos.

Hombres y mujeres, militares y civiles, policías y obreros, concejales y jueces, adultos y niños. Y que hay más de 300 asesinatos de ETA impunes, pendientes de resolver, sobre los cuales muchos de los que se beneficiarán de la sentencia del TEDH conocen datos decisivos.

El Gobierno debe corregir el rumbo. No se puede consentir que los totalitarios establezcan los términos del debate. ¿En cuántas ocasiones ha dicho el ministro del Interior que hay motivos para ilegalizar a los comandos políticos de ETA, para después no hacer nada?

¿Habrá que recordar otra vez el caso de Bolinaga, o los cambios en la política penitenciaria, o la inacción ante la estancia pública y notoria de los jefes terroristas en Noruega?

Aplicar la sentencia de Estrasburgo de la forma menos dañina para las víctimas debe ser sólo el primer paso de un cambio radical, de volver al camino de firmeza democrática y claridad en el discurso, de volver a llamar a las cosas por su nombre y poner a cada uno en su lugar. Honrar a las víctimas y plantar cara a los criminales y a sus amigos.

8 comentarios:

Tomas Mansilla dijo...

Me había jurado no hablar más de estos criminales, pero es difícil abstraerse de un tema tan candente, y tan doloroso.
Todas las personas de bien deseábamos, más bien ansiábamos la desaparición de estos hijos de su mala madre, lo que no esperábamos es que el partido socialista, español para más señas, se bajaría los pantalones y los metería en las instituciones.
Luego está el pasotismo del PP, que habla mucho pero no hace nada constructivo, como se le ha llenado la boca al ministro del interior diciendo que las marcas Sortu, HB, y demás asesinos eran ilegales y que iría a por ellos, palabrería barata y asquerosa, duele, duele mucho, tanto, que yo he dejado de creer en tanto politiquillo de tres al cuarto.
Luego está el tribunal de derechos humano, vamos, pa mear y no echar ni gota, Pero, ¿quiénes son estos descerebrados? ¿Su palabra a de ser palabra de Dios? ¿Quiénes son ellos para interferir en leyes españolas? ¿Que esto es Europa? Pues que le den por el culo a Europa, en fin, que mucho me temo que al final les harán homenajes y a tragar.
Saludos Cordiales

Agapito dijo...


¡Muchas gracias amigo Tomás!. Comparto tu comentario de la "a" a la "z". Es la indignación que sentimos las personas de bien. Tiene más valor por vivir donde vives, por haber tenido que soportar a esos fanáticos, anacrónicos criminales.

Si pudiera estaría camino de Madrid para ir a la manifestación. A los que sentimos la justicia, a los que la amamos, la deseamos esta injusticia de los leguleyos gilipollas con toga de Estrasburgo y de la mierda de políticos de aquí, nos repatea.

Por lo menos que se sepa.

madolok dijo...

PATRIA MIA, MI ESPAÑA

Triste vida la de España
en los tiempos que hoy vivimos,
iguales a la postguerra
aunque no sean los mismos.
Hoy volvemos a encontrar
gente en las calles pidiendo,
volvemos a ver a madres
sufrir por su niño hambriento.
Hoy igual que hace años
los ricos nos van oprimiendo,
vuelven a ser señoritos
y esclavos nos están haciendo.
Hoy pretenden que mis hijos
a nada tengan derecho,
pretenden igual que antaño
las bocas guarden silencio,
sin recordar que con hambre
llega a sublevarse el pueblo.
¡Patria mía, mi España!
Contigo que hemos hecho?
de una patria libre y grande
una Europa sin techo.
Estrasburgo crea justicia,
la ley Parot no tenemos,
y así campan a sus anchas
malhechores de otros tiempos.
Dña. Merquel pone firme
a Rajoy muerto de miedo
y él con su verborrea
cree convencer al pueblo.
Los ciclos hoy se repiten,
estos no son años buenos
la rueda gira al revés,
perdemos lo que tenemos.
Me pregunto hasta donde
Puede llegar el silencio,
que los suicidios no valen,
que a ellos les importa un bledo.
Seamos un poco listos
la fuerza la tiene el pueblo,
es cuestión de concienciarse
y saber lo que queremos.
No queremos ir atrás,
ya basta de sufrimientos,
dejemos a nuestros hijos
la Patria de un pueblo nuevo.

Octubre 2013




Dolores Caramazana C.

Agapito dijo...



¡Gracias Madolok por tu aportación al blog!. Buenos, dramáticos tus versos.

Anónimo dijo...

Ya muchos años que llegué a comentar que los etarras dispondrían de escolta y por desgracia no estaba desencaminado. Ahora me atrevo a asegurar que con el tiempo tendremos a algún etarra de lendakari y como no, de Presidente del gobierno español o comandando algún Ministerio de suma relevancia. ¡Tiempo al tiempo!
¿Cuantos Policias y Guardias Civiles llegaron a perder sus vidas por la simple retirada de una Ikurriña? = montón de ellos y ¿total para quë? = Para nada. Vivimos al antojo y conveniencia de los politicos de turno, al de los jueces y al puto tribunal europeo o de Estrasburgo. Malcon

Agapito dijo...


¡Gracias! Malcon por compartir la indignación. Veo que como yo eres de los que padecen indignación vieja, de toda la vida, cada vez que estos mataban. Pero no debemos caer en la desesperanza. Creo que la manifestación del domingo, de todo el rechazo social que se muestra en los foros, algún efecto conseguirá.

¡Hombre!: no creo que ninguno llegue a Presidente del Gobierno.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Cada vez que estos mataban, amigo Agapito, sentía indignación, asco y muchas más cosas que algún día te contaré en persona. Gracias por los comentarios que haces, de esto y de todo ya que más de una cosa positiva estamos logrando. Gracias de Malcon

Agapito dijo...


Amigo Malcon: Ya estoy deseando llegue ese día en que me contarás cosas en persona. Sobre todo porque estoy desean conocerte.

Un abrazo